"Me decían que era un envenenador serial, y ahora me piden que consiga veneno para todos", chicaneó Fernández

Aunque sin dar precisiones, el presidente Alberto Fernández les garantizó a los industriales del Norte que se mantendrá el régimen de biocombustibles. "No tienen que preocuparse por qué va a pasar con el biocombustible,  porque allí hubo una inversión muy grande", afirmó el jefe de Estado desde San Javier, en donde encabezó una reunión con el gobernador, Juan Manzur, y empresarios de la región. 

En el discurso, Fernández se refirió con fuertes cuestionamientos a la gestión de Mauricio Macri, y aseguró que olvidó al Norte. Para ejemplificar, señaló el estado del sistema de salud del país al momento de asumir y de enfrentar la pandemia de coronavirus. 

"El sistema sanitario había sido abandonado y estaba en estado penoso, habían dejado vencer vacunas. La mayor preocupación que tuvimos es que no nos pasara lo de Europa y otros lugares del mundo, que los hospitales  no tuvieran dónde recibir a los enfermos. Y logramos que ningún argentino enfermo haya ido a un hospital y le hayan dicho que no había lugar", se jactó.

Luego, apuntó contra su predecesor. "La pandemia nos cambió la agenda; no solo a nosotros, sino al mundo entero. Pero el mundo entero no tuvo que encontrar la pandemia después de Macri, y nosotros sí. Esa es la diferencia.", chicaneó.

Sostuvo también que su prioridad es que no suba el precio de los alimentos, esencialmente. "Me encanta que produzcan pero me preocupa como aumentan los precios. Algo que siempre sucede en este país. Hay que producir más y cuidar al consumidor argentino", manifestó. "Cuando uno dice que debemos cuidar el precio de la harina, el pan, la carne, la leche, los pollos, los huevos, los cerdos, hablamos de cuidar el bolsillo de la  gente. Todos celebramos que la Argentina crezca y que los precios internacionales suban. Pero cuándo va a ser el momento que hayamos aprendido que no podemos repetir la misma experiencia. No podemos seguir con la misma lógica de siempre. Yo tengo que cuidar la mesa de los argentinos, tenemos que  garantizar que estos precios internacionales no se vuelvan en desmedro  de los argentinos. Uno no quiere ejercer la espada del poder. No puede  ser que sea la misma discusión que tuve años atrás", reforzó.

"Quiero creer  que vivo en una sociedad que le presta atención a los que están mal.  Ayudemos entonces", reclamó, justo en momentos de tensión con el campo por un posible aumento en las retenciones o cupos a la exportación.

Respecto del Norte, dijo que es la región históricamente abandonada por el país, y que en la gestión de Cambiemos eso se profundizó. "Ya por lo pronto deben hacer 1.000 kilómetros para llevar lo que producen. Algo debemos hacer, estado y empresarios, para que esas  asimetrías desaparezcan. En los últimos cuatro años dejaron al Norte en un estado de abandono absoluto. A la Argentina les falta voluntad y ética de muchos", sostuvo.

Sobre el cierre, les habló a los industriales azucareros de la región. "Nos llevamos todos los deberes y estamos viendo. Hay que hacer que las cosas  funcionen, y eso no significa que dejen de producir. Cuando decimos  revisemos, no es para dejar de producir ni achicar, sino para que el  trabajo se sostenga y crezca", señaló.

Y cerró con una fuerte ironía, vinculada a la compra de las vacunas rusas Sputnik V para combatir el coronavirus. "Hasta hace 20 días yo era un envenenador serial que había comprado vacunas para envenenar, y ahora me piden por favor que consiga veneno para todos los argentinos", chicaneó.