10 Febrero 2021
LA GACETA / FOTO DE INÉS QUINTEROS ORIO
Momentos de tensión se vivieron hoy durante la audiencia de lectura de los alegatos en el procedimiento de destitución del juez Enrique Pedicone que se lleva adelante en la Legislatura. Al punto que la sala debió ser desalojada.
Al empezar la reunión, algunos de los representantes de las víctimas, como Lucas Mayer, increparon a Pedicone, por lo que el secretario del tribunal debió recordar a las partes que debían comportarse con respeto y decoro para que pudieran permanecer en la sala.
Pero la situación se revivió hacia el final de la cita, cuando Mayer volvió a gritarle al juez en medio de la sala. Allí intervino ya el presidente del Jurado de Enjuiciamiento, Daniel Posse, quien tomó el micrófono y ordenó que la sala fuera desalojada. Solo continuaron las partes: acusación, defensa y tribunal.
El proceso
La objeción central contra Pedicone radica en su actuación sin competencia durante la miniferia de agosto, cuando el juez liberó a un preso con preventiva, e intentó infructuosamente controlar a instancias de su hoy defensor Arnaldo Ahumada un procedimiento anti-covid-19 practicado por el fiscal Carlos Picón en el bar y billares Punto y Banca.
También se lo acusa por la violación del Código Iberoamericano de Ética Judicial por haber ventilado en la prensa una denuncia contra Daniel Leiva, vocal de la Corte, y la supuesta coacción del secretario Fernando Valladares, quien firmó un acta que incrimina al vocal Leiva, y, tras la exposición de los hechos, se desmintió a sí mismo.
Pedicone sostiene que lo quieren destituir por haber denunciado que Leiva le había solicitado que “manejara las intensidades” de una causa por supuestos abuso sexual y actos de corrupción endilgados al legislador Ricardo Bussi (FR).
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