Tucumán está atravesando el actual proceso económico recesivo con un contexto menos afectado que el resto del NOA y del país. Esto se refleja en los indicadores del consumo en varios productos y servicios, según lo afirma el cuarto Reporte Económico Estadístico y Social de la Federación Económica de Tucumán (FET), con datos actualizados en su mayoría hasta el 4º trimestre de 2020.
El estudio que analiza el comportamiento de la economía del NOA en base al Índice Sintético de Actividad de Provincias (ISAP) precisa que en Tucumán, durante 2020, esa actividad económica cayó un 4,28% respecto de 2019. En el 2° semestre/2020 comenzó la recuperación, puntualmente en el cuarto trimestre (3,95%) versus el tercero (3,47%).y marcar tres años consecutivos de reducción en el Producto Bruto provincial, cuya cifra se aproxima a la de 2010 y lleva a hablar de una década de estancamiento económico-social.
Al respecto, el presidente de la FET, Héctor Viñuales Santafe, destacó que a pesar que el año pasado fue complicado por la pandemia y por los problemas estructurales, la economía provincial, en términos relativos, tuvo un mejor comportamiento que la del país y la del resto de las provincias del NOA. “De acuerdo con el Estimador Mensual de Actividad Económica (Emae) del Indec, y que engloba a todo el país, la reducción fue del -9,98% respecto de 2019”. “En la última estimación del PBI argentino del Indec, al 3º trimestre de 2020, la economía cayó un -10,24% comparado con igual periodo de 2019, cifra negativa récord para la historia contemporánea del país”, explicó.
Factores incidentes
Sobre “el razonable” comportamiento de la economía tucumana en esta medición a un año del inicio de la pandemia, Viñuales Santafe indicó que se origina básicamente en la incidencia de dos sectores: uno, el azucarero, que pudo comercializar su producción en el mercado interno a precios razonables sin sobreoferta, con ingresos interesantes a pesar del bajo valor del bioetanol.
“El otro factor incidente es el referido a los recursos del sector público provincial –añadió-. En el ejercicio fiscal 2020 no hubo una caída en términos reales. Es más, creció por arriba del 52,80% el envío de fondos financieros del Estado Nacional a Tucumán. Y también hay que mencionar los gastos directos de la Nación que subieron un 52,90%, ganándole a la inflación anual que fue del 36,16%. Por lo tanto, aquellos sectores permitieron atenuar en parte el comportamiento negativo del resto del sector privado en la economía provincial”, aseguró.
El estudio de la FET remarca que el sector público, cuando tiene transferencias de la Nación que exceden los impuestos nacionales pagados en Tucumán, puede generar junto con el agro y las agroindustrias un “arrastre” positivo en el resto de la economía de Tucumán por su efecto multiplicador y por la importante participación en el PBG provincial (del orden del 55%).
En la lista de actividades que son alcanzadas en ese “arrastre” se menciona a las distintas producciones agroindustriales, las metalmecánicas, de autopartes, equipos, químicas, y las producciones textiles y de calzado, entre las destacadas. Apunta el informe que estos sectores son los que generan los recursos necesarios para sostener el consumo y la inversión local por sus ingresos en divisas extranjeras producto de las exportaciones, y en pesos por las ventas en el mercado interno.
Destaca el reporte que los ingresos públicos y privados sostienen al comercio, la construcción y a muchas otras actividades de servicios. Sin embargo, se estima que en el mediano plazo el sector privado va a tener un progresivo nivel declinante de actividad, ya que sus ingresos seguirán afectados por las medidas de políticas económicas del Gobierno (pese a los mercados externos muy positivos) y en especial por el atraso cambiario, los altos gravámenes a la exportación, la alta presión impositiva de los tres niveles del Estado, y el bajo valor de los productos importados en el mercado interno que gozan del privilegio de poder comprar dólares subsidiados por el Estado.
Otros sectores productivos exportadores ya afectados por estas medidas -pero que continúan operando- son el cerealero y de oleaginosas, y también el citrícola, que el año pasado registró una nueva caída en su producción y exportaciones. Al respecto, el análisis de la FET precisa que las exportaciones provinciales cayeron en 2019 un 14,80% y en 2020 un 18,74%. Cuando compara las exportaciones del último año con el promedio entre las campañas 2015 y 2019, la caída fue del 24,14%.
Datos sociales
En cuanto a la caída del empleo, en Tucumán se centró en el sector privado y en especial en los servicios de hotelería, cultura, gastronomía, turismo, esparcimiento, construcción y parte del comercio (los empleados de estas actividades representan un tercio del empleo privado total de la Provincia). “Vale remarcar que el índice de desempleo local (Indec), como así el del país, no reflejan acabadamente la situación del empleo provincial por la forma y tecnicismos usados en el cálculo”, remarcó el contador Viñuales Santafe.
“Los indicadores publicados desde el 2º trimestre de 2020, en plena pandemia, muestran una discutible caída en la tasa de desempleo en Tucumán en plena recesión económica. Según el Indec, en el primer trimestre 2020 fue del 13,25%, y el cuatro el 9,50%”, resaltó.
Apuntó que el sector público tucumano tiene registrado 133.500 empleados (Sipa-Anses) y que el año pasado incorporó 1.614 personas más. El sector privado registrado, en tanto, perdió 6.911 puestos. En Tucumán, el sector público ostenta el 43,21% del empleo total (en blanco), cuando a nivel nacional esa cifra es del 19,90%. El informe resalta que, a medida pasan los años, la participación del empleo estatal crece de manera continua.
Como conclusión del cuadro de situación económica-social de la Provincia, el titular de la FET planteó un profundo desafío de trabajo entre el sector privado y público para encarar y resolver los problemas que han afectado la economía y el nivel de vida de la comunidad tucumana. “A esta tarea la puede favorecer el interesante contexto que presenta este año el mercado internacional de commodities; Tucumán genera materias primas competitivas a nivel internacional y solo requiere reglas de juego racionales y estables”, sentenció.