NOVELA
LOS ABISMOS
PILAR QUINTANA
(Alfaguara – Buenos Aires)
Con una prosa ligera y lúcida, Quintana nos adentra en la memoria de una niña que intenta comprender su historia familiar. Claudia narra al detalle, lugares, sensaciones, pensamientos, con la ingenuidad propia de su edad y, a pesar de ello, advierte la atmósfera desdichada que la rodea. La protagonista sostiene una voz narradora que bucea en la oscuridad de las relaciones humanas, incluyendo la de sus padres, abrazada desde siempre a un mundo de mujeres. La niña escucha, reflexiona y aprende, junto a su muñeca Paulina, en una casa donde todos son adultos, pero ella se encuentra a la intemperie. Testigo invisible de la estirpe de mujeres perseguidas por la muerte que no logran apartar.
El epígrafe de Fernando Iwasaki, nos anuncia una novela inmersa en las profundidades -Mi alma se precipita por un abismo negro y repugnante que me penetra viscoso por la boca, por los oídos, por la nariz-. A partir de allí, el Cali verde y brutal como la selva, habla a través de los ojos de la protagonista (“Me encantaba correr por la selva, que las plantas me acariciaran, quedarme en el medio, cerrar los ojos y escucharlas”) y el recuerdo tenaz de la voz de la madre repitiendo lo que escuchó de su abuela (“Una vez, en el club, ella oyó cuando una señora le preguntó a mi abuela por qué no había tenido más hijos.—Ay, mija —dijo mi abuela—, si hubiera podido evitarlo, tampoco habría tenido a esta. Las dos señoras soltaron la carcajada”).
La escucha de los niños, que torpemente pensamos que no entienden (“Mi mamá siempre estaba en la casa. Ella no quería ser como mi abuela. Me lo dijo toda la vida”). ¿Pueden las vivencias de la niñez marcar el destino de este linaje de mujeres? Una madre ausente, un padre que trabaja todo el día, el miedo al abandono y la orfandad.
Pilar Quintana narra con diálogos simples, la relación disímil entre una madre y su hija enmarcada en la particular y esplendorosa geografía de Cali. Los abismos reivindica con empeño la producción colombina en el ámbito de la literatura, y se lleva el Premio Alfaguara 2021, merecidamente.
Los abismos*
Por Pilar Quintana
Mi mamá estaba de pie al final de la escalera. Parecía una loca. Llorando, descalza, con la piyama blanca y el pelo desordenado sobre la cara. Una loca o una aparición, la Llorona. Solté la maleta y subí.-Todavía no puedo creerlo -dijo.Le pasé la mano por la cintura y se dejó llevar a su cuarto. Nos sentamos en el borde de la cama.-¿Cómo se murió?-Se mató.-¿Cómo así?-Se suicidó.-¿Cómo?-Se tiró por el balcón.-¿A la calle?-Los dieciocho pisos.Vi la caída. Gloria Inés dando botes en el aire. Cabeza abajo, cabeza arriba. Igual que la princesa Grace de Mónaco dentro del carro mientras se despeñaba. Gloria Inés estampada contra el andén. Larga y maciza. El pelo crespo abierto sobre el pavimento. Natalie Wood en asfalto.Todos mis muertos, pensé. Si los de mi papá estaban en sus silencios y los de mi mamá eran las plantas de la selva, los míos eran las hojas a punto de caerse. Mi abuela niña, mi abuelo amargado, la tía Mona, mi abuelo oso, mi abuela lombriz y cobra, las mujeres de las revistas, Gloria Inés, Paulina…
* Fragmento.
PERFIL
Pilar Quintana (1972), escritora, guionista y publicista colombiana, fue nombrada como uno de los 39 autores menores de 39 años más interesantes de Latinoamérica por el Festival Hay. Representó a Colombia en el International Writing Program de la Universidad de Iowa. Su novela Coleccionistas de polvos raros fue premiada en 2010 por el Festival La Mar de Músicas de Cartagena, España. La perra fue galardonada con el IV Premio Biblioteca de Narrativa Colombiana. En 2021 su novela Los abismos obtuvo el Premio Alfaguara de Novela 2021.
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