29 Mayo 2021
ARCHIVO LA GACETA / FOTO DE OSVALDO RIPOLL
Mañana finaliza la primera etapa de las severas restricciones adoptadas por el Gobierno a partir de la ola de casos de coronavirus, tanto a nivel nacional como en Tucumán. Sin embargo, el DNU firmado por el presidente Alberto Fernández establece que esta "Fase 1" volverá a regir durante el fin de semana próximo, del 5 y 6 de junio. Ante este escenario, los propietarios de bares y restaurantes de la provincia tienen una decisión tomada.
"No nos queda otra opción que trabajar, incluido el fin de semana de las restricciones", indicó Constanza Bauque, titular de la Cámara de Actividades Gastronómicas de Tucumán, en diálogo con LAGACETA.com.
Este sector productivo, al igual que los comercios de rubros considerados "no esenciales" por el DNU nacional, había encabezado una encendida protesta el fin de semana pasado, cuando comenzaron a regir los nueve días de prohibición de actividades por la crisis sanitaria que desató la pandemia.
Según se pudo ver en las calles de Tucumán, buena parte de los propietarios de bares y restaurantes decidieron no acatar la normativa bajo dos argumentos: que los contagios de covid-19 no se producen en esos establecimientos, y que la situación económica que arrastra el sector desde 2020 es verdaderamente crítica.
Sin embargo, esta posición motivó distintos operativos policiales en la provincia, que derivaron en detenciones y en la apertura de expedientes en los tribunales provinciales.
Si bien todavía no hay confirmaciones oficiales, se espera que el lunes se retome al esquema de restricciones que regía con anterioridad a la semana que finaliza. ¿Cuál es la expectativa del sector gastronómico de Tucumán?
"Nosotros vamos a mantener la postura de abrir. No sólo nosotros, esta es una postura que está siendo avalada por muchas otras provincias y ciudades del país con las que estamos en contacto, como Córdoba, Provincia de Buenos Aires y Mar del Plata", indicó Bauque.
La titular de la Cámara de Actividades Gastronómicas de Tucumán explicó que no ha existido hasta ahora una convocatoria de las autoridades provinciales para dialogar con el sector. "Ayer estuvimos reunidos con el intendente (Mariano) Campero, y se comprometió a acompañarnos a través de un decreto (municipal) para que, en caso de existir nuevas restricciones, se trabajar en Yerba Buena", remarcó.
De todas maneras, insistió en que los empresarios de este rubro no fueron escuchados por las autoridades provinciales. "Se toman las decisiones sin convocar al sector”, lamentó.
En ese sentido, Bauque consideró que, de abrirse el diálogo, se podrían analizar los pasos a seguir de manera conjunta.
"Nuestro tema es económico. En la medida en que podamos trabajar, no hay más que hablar. Si nos prohíben trabajar, la expectativa es que nos llamen para ver cómo solucionamos el tema económico, que es desesperante. La verdad es que estamos sentados encima de un polvorín con un cigarrillo encendido. La gente del sector está enojada porque se toman decisiones sin convocarnos. Además, hay mucha incertidumbre. En la gastronomía hay que tener previsibilidad para poder decidir sobre la compa de los productos para la venta y otras cuestiones. Con decisiones de último momento, el daño que se hace es mucho más profundo", analizó.
25 DE MAYO Y SANTA FE. Gastronómicos protestaron el sábado pasado por las restricciones. Archivo / Foto gentileza de Graciela Núñez
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