Luego de varios meses de silencio tras su salida del poder, Angela Merkel se pronunció sobre la invasión de Rusia a Ucrania. Sostuvo que este hecho se trata de una "ruptura profunda" en la historia de Europa después de la Segunda Guerra Mundial.
La ex canciller de Alemania, quien participó en la despedida del sindicalista Reiner Hoffmann, que renunció a la jefatura de la influyente Confederación Sindical Alemana; advirtió que las consecuencias del conflicto bélico serán "de largo alcance".
Además, lamentó las violaciones a los derechos humanos perpetrados contra civiles en territorio ucraniano. "Bucha es representativo de este horror", señaló, en referencia a las presuntas masacres de civiles en los alrededores de Kiev.
Por último, la ex mandataria consideró que existe "un pequeño rayo de esperanza" en "esta tristeza infinita" por el apoyo a los ucranianos que mostraron muchos países vecinos, como Polonia y Moldavia, pero insistió en que "nunca deben darse por sentadas la paz y la libertad".