Yerba Buena: se afianza la teoría del mercado negro de bicis

En cuestión de horas robaron dos bicicletas; una de ellas fue valuada en $2 millones, y luego fueron recuperadas en diferentes operativos

EN PLENO PROCEDIMIENTO. Policías y los vigías durante la detención del adolescente acusado de robo.  EN PLENO PROCEDIMIENTO. Policías y los vigías durante la detención del adolescente acusado de robo.

No sólo se recuperaron las bicicletas que habían sido robadas, sino que se logró reunir nuevas evidencias para demostrar lo que muchos bikers se niegan a aceptar: la existencia de un cada vez más grande mercado negro de rodados.

José Ignacio Elías denunció el lunes que desconocidos habían ingresado al country Vera Terra y le sustrajeron una bicicleta valuada en más de $2 millones. Efectivos al mando de los comisarios Walter Colombres, Carlos Ruiz y Joaquín Girbeaux, analizaron las imágenes de las cámaras de seguridad e identificaron a los que habían sustraído el rodado, por lo que se emitió un alerta para todas las dependencias de Yerba Buena.

Por la tarde, personal que hacía recorridos por la zona de la avenida Presidente Perón, cerca de la rotonda que conduce a Horco Molle, descubrió a dos jóvenes en una motocicleta que llevaban cargando una bicicleta similar a la que había sido denunciada como robada. Se inició una persecución y los sospechosos arrojaron el rodado a un sitio baldío para escaparse. Los uniformados se trasladaron hasta la comisaría de Yerba Buena donde comprobaron que era la sustraída. Los funcionarios de la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos, que dirige Diego López Ávila, ordenaron citar a la víctima para que se le devuelva el valioso bien.

Otro caso

El lunes a la tarde, en la esquina de Presidente Perón y Rector Marigliano, un joven de 21 años y un menor de 16, después de amenazar a una biker, le quitaron la bicicleta en la que se trasladaba.

Las víctimas avisaron a miembros de la Guardia Urbana Municipal que emitieron un alerta general que movilizó a los vigías y a los policías que se encontraban en la zona. A los pocos minutos, la base de la GUM recibió un llamado alertando que en Caracas al 2.600 bikers habían detenido a uno de los autores del hecho y recuperado el rodado. Casi al mismo tiempo hubo una denuncia por un situación similar. Se trasladaron hasta ese lugar y arrestaron al otro acusado de participar en el ataque.

Fuentes policiales y del municipio de la vecina ciudad informaron que este caso fue uno de los pocos en denunciarse en los últimos meses fuera de “Senda Segura”, el programa que implementaron para proteger a los bikers que transitan por una determinada zona de 10 a 18.

Los hechos generaron una polémica en los grupos de los amantes de este deporte. Ya son cada vez menos los que siguen pensando que no existe un mercado negro de bicicletas.

“Hay personas que saben muy bien lo que cuestan los rodados. Hay muchos que salen una fortuna y son un imán para los delincuentes. Por eso deberían ser más cuidadosos en dar a conocer información en las redes”, comentó Gustavo Fanjul.

En la provincia hay antecedentes que abonan esta teoría. En el marco de una investigación dirigida por el fiscal López Ávila, el año pasado se desbarató un grupo que robaba bicicletas del interior de los domicilios y luego las revendía en otras ciudades tucumanas y en otras provincias. “Lo hacían así porque era la única manera de que no los descubrieran”, explicó una fuente judicial.

El secretario de Seguridad de Yerba Buena, Maurició Argiró, sostuvo que los botines que consiguen son llevados a Catamarca y a Santiago del Estero para ser vendidos de manera ilegal. “La ecuación es muy simple: si hay robos es porque hay un mercado negro”, graficó.

Juan Carlos Pedraza es un biker que no forma parte de ningún grupo, pero está atento a lo que ocurre en los senderos. “A mí nadie me va a hacer creer que estos robos son casuales. Los ladrones saben muy bien lo que se llevan. Evidentemente hay alguien que hace una tarea de inteligencia para apoderarse de las bicicletas más caras. Los que amamos este deporte debemos ser los primeros en actuar en contra de estos grupos. Hay que desconfiar de todo lo que se vende en las redes sociales y denunciar si descubrimos algo”, explicó.

El comisario Ruiz aclaró que estos dos casos se esclarecieron por la reacción de las víctimas. “Ellos fueron los que hicieron las denuncias velozmente, lo que permitió articular una serie de medidas con la GUM, y que llevó a recuperar las bicicletas. Además nos sirve mucho para seguir investigando, a fin de determinar si hay una banda por detrás, que es lo que nos piden los mandos superiores”, finalizó.

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