Así será el funeral de Estado de la reina Isabel

La ceremonia contará con la presencia de 2.000 invitados y más de 4.100 millones de personas la seguirán en directo por TV y por las redes sociales.

PROTAGONISTA. El rey Carlos III saludó al público durante la intensa jornada sabatina del funeral real. twitter the royal family PROTAGONISTA. El rey Carlos III saludó al público durante la intensa jornada sabatina del funeral real. twitter the royal family
18 Septiembre 2022

El funeral de la reina Isabel II, fallecida el 8 de septiembre, se realizará mañana en la Abadía de Westminster en Londres. Se trata del primer funeral de Estado desde el del ex primer ministro Winston Churchill en 1965, por lo que se espera contar con la presencia de todas las autoridades del Reino Unido y de gobernantes de todo el mundo.

El féretro salió del Palacio de Buckingham el miércoles pasado para ser instalado en Westminster Hall, en el edificio del Parlamento. Fue trasladado en una carroza de la Tropa Real de Artillería a Caballo del rey, y estuvo acompañado por un desfile militar.

El encargado de encabezar la procesión fue el rey Carlos III. Durante el trayecto, la multitud estuvo en su mayoría en silencio y caminaron a lo largo de Queen’s Gardens, The Mall, Horse Guards y Horse Guards Arch, Whitehall, Parliament Street, Parliament Square y New Palace Yard.

Una vez en Westminster Hall, el ataúd fue ubicado sobre una plataforma elevada conocida como catafalco, envuelto en el estandarte real, con la corona imperial del Estado, el orbe y el cetro encima. Desde entonces y hasta mañana, la reina permanecerá en capilla ardiente para que el público pueda despedirse.

El período de duelo nacional durará hasta mañana, según anunció el Gobierno. En tanto, la familia real cumplirá un período de luto durante siete días más. Mañana por la mañana, el ataúd será llevado en procesión a la Abadía de Westminster para el funeral de Estado.

La ceremonia empezará a las 10 (las 6 en Argentina) con la presencia de 2.000 invitados, y será seguida por 4.100 millones de personas en el mundo por medio de la televisión y de las redes sociales. Entre los líderes internacionales que participarían se encuentra el presidente de Estados Unidos, Joe Biden; de Alemania, Frank-Walter Steinmeier; de Italia, Sergio Mattarella; y de Brasil, Jair Bolsonaro, así como los reyes de España. Entre las principales ausencias se destaca la del presidente ruso, Vladimir Putin, quien no fue invitado por la guerra en Ucrania, y la del presidente chino, Xi Jinping, quien enviará en su lugar al vicepresidente, Wang Qishan.

Algunos de los líderes mundiales invitados ya comenzaron a llegar a Inglaterra, como la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, quien el viernes despidió a la soberana en la capilla ardiente. Además, se esperaba que anoche arribaran representantes de una decena de países de la Mancomunidad de Naciones británica, con quienes Carlos III tenía previsto reunirse.

Después del funeral, el ataúd de la reina viajará en procesión desde la Abadía de Westminster hasta Wellington Arch. Allí el coche fúnebre transportará el féretro a lo largo de Long Walk hasta la Capilla de San Jorge, en la Capilla de Windsor, donde se llevará a cabo un entierro religioso privado para los miembros de la familia real. A las 19.30 (hora local) Isabel II será sepultada.

Sus restos descansarán junto a los de su marido, el príncipe Felipe, fallecido el año pasado. Serán depositados en la capilla del rey Jorge VI, padre de la monarca. Allí también yacen la hermana de Isabel, la princesa Margarita, y la madre de ellas.

Fila de 14 horas

Ayer, durante todo el día, miles de británicos soportaban una larga fila de 14 horas formada en las afueras del Parlamento para despedir a la reina, a la que se acercaron a saludar el rey Carlos III y su heredero, el príncipe Guillermo de Gales.

Vestidos con traje y corbata negra, ambos saludaron y conversaron con el público congregado en la capital inglesa, que los recibió al grito de “Viva el Rey” y “Dios bendiga al príncipe de Gales”. La capilla ardiente, instalada desde el miércoles en el Westminster Hall, llegó a acumular una cola de 24 horas. Se espera que unas 750.000 personas pasen por allí hasta la madrugada de mañana.

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