08 Octubre 2022
La ONU entiende que la pandemia ha exacerbado las desigualdades que existían de base en el mundo y ha intensificado los impactos socioeconómicos, ambientales, climáticos y de salud en la vida de las personas mayores, especialmente en las mujeres, que constituyen la mayoría de las personas de edad avanzada.
A pesar de que las mujeres mayores continúan contribuyendo significativamente en la vida política, civil, económica, social y cultural, sus aportaciones y experiencias siguen siendo invisibles y desatendidas, limitadas por las desventajas de género acumuladas a lo largo de la vida. La intersección entre la discriminación basada en la edad y el género agrava las desigualdades nuevas y existentes, incluidos los estereotipos negativos que combinan discriminación por edad y sexo. Por eso, la ONU estableció al 1 de octubre pasado, cuando se conmemoró el Día Internacional de las Personas Mayores, la temática de “La resiliencia de las personas mayores en un mundo cambiante”.
“El tema de 2022 del Día Internacional de las Personas Mayores sirve como sello distintivo y recordatorio del importante papel que desempeñan las mujeres mayores para superar los desafíos globales y contribuir con soluciones que aúnan resiliencia y fortaleza. Reconocer las aportaciones vitales de las mujeres mayores, promover la inclusión de sus voces, y conocer sus necesidades y perspectivas es fundamental para crear políticas que atiendan nuestros retos locales, nacionales y globales. Este Día Internacional es un llamamiento a la acción y una oportunidad para escuchar las voces de las mujeres mayores y mostrar su resiliencia y contribuciones en la sociedad, mientras se promueven diálogos sobre políticas para mejorar la protección de los derechos humanos de las personas mayores y reconocer sus aportaciones al desarrollo sostenible”, sostiene Naciones Unidas.
Las mujeres adultas, como concluye el organismo, son pilares de nuestras sociedades modernas que en ocasiones son subestimadas, dejadas de lado o “abandonadas”, pese a que contribuyen en el sostenimiento de la familia, del hogar, de la educación y de la producción. En una cultura hiperconectada, subida a una autopista de información y de una forma de vivir vertiginosa, los adultos mayores muchas veces quedan fuera de ese sistema de interrelación e interacción social. En algunos casos por falta de conocimiento de las herramientas tecnológicas y en otros porque eligen mantener un sistema de relación social cara a cara.
La fecha de Naciones Unidas sirve, justamente, para tener una visión de respeto y acercamiento a los adultos mayores, que con su sapiencia y experiencia de vida pueden aportarnos una visión diferente y un aprendizaje que no está en las redes sociales.
Destacar la resiliencia de las mujeres mayores frente a las desigualdades ambientales, sociales, económicas y de por vida; sensibilizar sobre la importancia de mejorar la recopilación de datos a nivel mundial, desglosados por edad y género; hacer un llamamiento a los estados miembros, las entidades de la ONU, ONU Mujeres y la sociedad civil para que incluyan a las mujeres mayores en el centro de todas las políticas, asegurando la igualdad de género; estudiar la función de las políticas y los marcos jurídicos para garantizar la privacidad y la seguridad de las personas de edad en el mundo digital son algunos de los objetivos que se fijaron para este año, a partir de la conmemoración de esta fecha.
Resulta una invitación para reflexionar y mirar a nuestros adultos mayores con el respeto y la valorización que merecen.
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