El delantero brasileño Richarlison enfrenta una angustiosa espera para descubrir el alcance de una lesión que le obligó a salir ayer en la victoria del Tottenham Hotspur, en la Premier League contra el Everton.
Richarlison se ha consolidado como el "9" de Brasil y es el favorito para liderar el ataque del equipo en el Mundial de Qatar, que comienza el próximo mes.
Pero se retiró cojeando al principio de la segunda parte con una lesión de pantorrilla y se someterá a una resonancia magnética el lunes.
El entrenador del Tottenham, Antonio Conte, ha descartado a Richarlison para visitar al Manchester United la próxima semana, pero se teme que la lesión pueda obligarlo a un largo período de inactividad.
Richarlison, que ha marcado 17 goles en 38 partidos con la selección brasileña, abandonó el estadio del Tottenham con muletas y se mostró emocionado al ser entrevistado tras el partido. "Es un poco difícil de decir porque está cerca de la realización de mi sueño (el Mundial)", dijo a ESPN Brasil.
"Ya sufrí una lesión similar a ésta, pero espero que pueda curarse lo antes posible. La última vez, cuando estaba en el Everton, estuve de baja unos dos meses".
"Es difícil hablar en este momento, pero vamos a ver, me recuperaré. Tengo un escáner el lunes, pero hasta caminar me duele. Tengo que ser positivo si quiero ir a Qatar", se lamentó el brasileño.