TERRANOVA, Canadá.- Los equipos de rescate pasaron todo el día de ayer rastreando el origen de los sonidos escuchados desde las profundidades del Atlántico Norte, con la esperanza de localizar el sumergible con cinco personas a bordo que desapareció el domingo, en su descenso hacia los restos del Titanic, el barco hundido en 1912 que se convirtió en una atracción para turistas adinerdos y buscadores de aventuras.
La Guardia Costera de Estados Unidos informó del despliegue de vehículos operados por control remoto (ROV, por sus siglas en inglés) de búsqueda en la zona en la que aviones canadienses detectaron el martes los ruidos submarinos mediante boyas de sonar. Las estimaciones sugieren que el suministro de aire del sumergible podría agotarse hoy, a más tardar esta noche
“Desconocemos el origen de ese ruido”, dijo a la CBS el contralmirante de la Guardia Costera estadounidense John Mauger.
Dos ROV y un buque de superficie fueron utilizados para tratar de localizar la fuente, señaló. “Este es un sitio increíblemente complejo”, dijo Mauger. Incluso si se lo localiza, recuperarlo presenta enormes desafíos, dadas las condiciones extremas a cuatro kilómetros bajo la superficie.
Equipos de Estados Unidos, Canadá y Francia rastrillan en unos 25.900 kilómetros cuadrados de mar abierto, aproximadamente el tamaño del Líbano.
El sumergible Titán, operado por la empresa estadounidense OceanGate Expeditions, inició su descenso a medianoche del domingo, según la Guardia Costera estadounidense. Perdió el contacto con su buque de superficie matriz durante lo que debería haber sido una inmersión de dos horas hasta el Titanic.
Los restos del trasatlántico británico, que se hundió al chocar contra un iceberg en su viaje inaugural en 1912, yacen en el lecho marino a una profundidad de unos 3.810 metros. Se encuentra a unos 1.450 kilómetros al este de Cape Cod (Massachusetts) y a unos 650 kilómetros al sur de San Juan de Terranova.
Entre las personas que viajaban a bordo del sumergible, una expedición que cuesta 250.000 dólares por persona, están el multimillonario y aventurero británico Hamish Harding, y el empresario de origen paquistaní Shahzada Dawood, con su hijo Suleman, de 19 años.
También viajaban el explorador francés Paul-Henri Nargeolet, de 77 años, y Stockton Rush, fundador y director ejecutivo de OceanGate Expeditions. (Reuters)