20 Julio 2023
REUTERS
ROMA, Italia; PEKÍN, China; TEHERÁN, Irán.- Ciudades europeas en alerta por el calor, miles de personas en tratamiento médico en Irán tras la exposición a altas temperaturas y a las tormentas de polvo y arena sequías devastadoras, incendios forestales e inundaciones que causan estragos desde Estados Unidos hasta China, son algunas de las calamidades que se abaten sobre el hemisferio norte, en el verano más caliente del que se tenga registro.
Los científicos vienen advirtiendo que el cambio climático, causado por emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de la quema de combustibles fósiles, hará que las olas de calor sean frecuentes, graves y mortales.
El domingo, una confluencia récord de calor y humedad se tradujo en una sensación térmica de más de 65,7°C, en los límites mismos de la supervivencia humana, medido en el Aeropuerto Internacional del Golfo Pérsico de Irán. Italia, uno de los focos mundiales de la ola de calor extremo, que llega desde África, puso en alerta roja 23 ciudades porque esperaban temperaturas de hasta a los 46° C ayer, cosa que ocurrió en la isla mediterránea de Cerdeña.
El agravamiento de la ola de calor que azota el sur de Europa ha batido récords y provocó advertencias sobre un mayor riesgo de muertes y ataques cardíacos.
La región del Lacio, que incluye la capital italiana, reportó un aumento del 20% en urgencias médicas respecto de la misma época del año pasado a causa del calor.
Los incendios forestales afectaban por tercer día el oeste de Atenas, la capital griega, y los bomberos trabajaron durante la noche para mantener las llamas alejadas de las refinerías costeras. Avivados por vientos erráticos, los incendios destruyeron decenas de casas, obligaron a huir a cientos de personas y cubrieron la zona de un espeso humo. Según las previsiones, las temperaturas podrían alcanzar hoy 43ºC.
El Ministerio de Sanidad de Italia activó una línea telefónica de información y equipos de trabajadores sanitarios visitaron a los ancianos en Roma.
El fabricante de autos Stellantis detuvo la producción en su planta de Pomigliano, cerca de Nápoles, por las altas temperaturas. En la fábrica de baterías Magneti Marelli amenazaron con una huelga en su planta de Sulmona. Los sindicatos afirman que “el calor asfixiante está pone en peligro la vida de los trabajadores”.
En Alemania, la ola de calor suscitó un insólito debate sobre si los lugares de trabajo deberían introducir siestas para los empleados.
Corea del Sur está siendo azotada por fuertes lluvias en las regiones del centro y el sur. El sábado, más de una docena de vehículos quedaron anegados en un paso subterráneo de la ciudad de Cheongju al derrumbarse el dique de un río. En la provincia suroriental de Gyeongsang del Norte murieron 22 personas, muchas por corrimientos de tierras y remolinos de torrentes.
China recibió esta semana al enviado estadounidense para el clima, John Kerry. En Pekín, que alcanzó un nuevo récord de temperaturas por encima de los 35º C por vigésimo octavo día, Kerry expresó su esperanza de que la cooperación ante el cambio climático pueda redefinir los lazos entre las dos superpotencias.
“Es una amenaza universal para todos los habitantes del planeta y requiere que las naciones más grandes del mundo, las economías más grandes del mundo, los mayores emisores del mundo, se unan para trabajar no sólo por nosotros, sino por toda la humanidad”, dijo Kerry a Han. (Reuters)
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