La producción de papa en la provincia se realiza en diferentes zonas y en diferentes épocas del año y generalmente se produce con una necesidad de riego casi permanente, por lo que los problemas de sequía poco afectaron, salvo que la disponibilidad del recurso agua para regar haya sido afectada, manifestó el productor papero José Linares. “En general durante la campaña pasada mantuvimos un nivel de producción relativamente bueno, con precios que se mantuvieron en general equilibrados y que permitieron mantener una mínima rentabilidad”.
Igualmente la preocupación del sector hoy es que los costos productivos en general para producir papa es que se elevaron mucho, no solo porque el valor del cambio dólar subió, sino que también aumentó el valor de los insumos en dólares debido a la incertidumbre que tienen los importadores de insumos por el cambio de reglas, sobre todo al momento de solicitar la importación de estos productos.
El importador hacía todo para tener los productos, pero al solicitar el pago a los proveedores ahí surgía el problema por la tardanza.
“Estos problemas que afrontamos a fecha de hoy hizo que con valores estables de ventas de la papa producida, actualmente hayamos perdido rentabilidad”, dijo. “Esperamos que esta situación cambie si es que la economía se estabiliza y eso nos permita trabajar y lograr mantener la superficie que actualmente hacemos”.
La consecuencia de la situación de hoy es que seguramente se reducirá la superficie en producción en mediano plazo y consecuentemente una disminución de la oferta, explicó. En lo referente a cómo están los cultivos hoy, describió que la producción de Las Estancias y de Tafi del Valle, que abastecen de semillas, se mantienen bien y con normalidad y se espera que las siembras de mayo y junio, que se realizan con esta semilla producida en los valles, se realice con normalidad. “Si bien las altas temperaturas que se están dando afectaron un poco la productividad de los lotes plantados, creemos que no va a ser grave y que dispondremos de cantidad y calidad suficiente de semilla para la siembra de consumo en el bajo”.
Reiteró que la principal preocupación está basada en los costos actuales, “por lo que se necesita algún tipo de medida como economía regional que nos permita trabajar con normalidad y abastecer al mercado”.