Treinta y siete conductores dieron positivo en controles de alcoholemia realizados en las zonas Sur y Este de la provincia, según informaron las Unidades Regionales de la Policía, que dieron cuenta de los operativos de control de infracciones realizados en la madrugada del domingo, entre las 4 y las 8 de la mañana. En el informe no se dieron a conocer cifras de accidentes, aunque datos recientes del Hospital Padilla dan cuenta de que de los 200 casos que se atiende por día en ese nosocomio unos 20 son accidentados y de ellos el 80 por ciento son motociclistas, la gran mayoría varones de la franja etaria de entre 15 y 34 años. Esto coincide con cifras que dio a conocer en junio la Agencia Nacional de Seguridad Vial, en ocasión del día de la prevención de accidentes de tránsito. Las estadísticas 2023 oficiales reflejan que 4.369 personas murieron en 3.642 siniestros viales. La mayoría fueron motociclistas. Y de acuerdo a un estudio nacional de 2023 de la ANSV,  el consumo de alcohol es la principal sustancia psicoactiva declarada por los conductores siniestrados viales en el 22,1% de los casos.

En junio,  consultado por el efecto de la normativa de alcohol cero al volante, que reemplazó al anterior límite de 0,5 g/l, un profesional del hospital mencionó que no se ha observado una disminución significativa en los casos de politraumatismos relacionados con el consumo de alcohol.  “A pesar de los esfuerzos en campañas de educación vial y controles por parte de las autoridades, aún falta mucho para que como sociedad tomemos conciencia sobre la importancia de cumplir con las normas de tránsito y la necesidad de un cambio cultural profundo”, describió.

Así las cosas, conviene observar el sentido de los operativos de control, que con alta probabilidad ayudan a evitar accidentes (con frecuencia también los realizan municipalidades como las de Yerba Buena y San Miguel de Tucumán) y analizar qué más habría que hacer para cambiar conductas, que es lo que observa el médico como un problema que no se resuelve. Es decir, la sociedad gasta dinero en operativos -horas de tarea de agentes de tránsito y policiales- y mucho dinero en atender pacientes -aproximadamente el 70% del presupuesto del hospital se va en atención de traumatizados, al menos así se decía en un informe publicado el 26/12/2016- y al final no se producen cambios. En el informe del Día de la Seguridad Vial la ANSV indicó que “para cambiar esta realidad, el organismo se propone, a corto y largo plazo, y a partir de datos precisos y confiables, implementar políticas públicas que generen menos muertos y heridos”. Como ya se señaló en un editorial de LA GACETA a propósito de este reconocimiento de la ANSV, conviene recordar la aseveración de la subdirectora del Hospítal Padilla, que dijo que “venimos manejando las mismas estadísticas todo el tiempo. No se ha notado el cambio. No han bajado los politraumatizados por el tema del alcohol cero”. Y concluyó: “son cosas prevenibles con educación. Pero nosotros siempre vamos a contramano”.