Los 51 acusados del caso Mazan han sido los protagonistas en la séptima jornada del proceso judicial contra Dominique Pelicot, quien drogó a su esposa Gisèle Pelicot durante años para que otros hombres abusasen de ella, publica “Infobae”.
Durante la mañana, uno de los cuatro investigadores de la Policía Judicial francesa, Stéphan Gal, ha hablado del primer grupo de acusados y ha destacado que uno de ellos no se acercó a Gisèle Pelicot. El hombre, identificado como “Rasmus”, conocía los actos de Dominique y seguía su mismo modus operandi con su propia mujer. “Rasmus” terminó involucrado en el caso al encontrarse imágenes de su esposa en el disco duro principal de Dominique Pelicot. Ambos mantenían contacto a través de la plataforma Coco, por donde se conocieron. Los intercambios entre ambos dejan claro el modus operandi utilizado: “5 pastillas trituradas de Temesta en una bebida”, una marca de lorazepam. Este ansiolítico, sin embargo, no se utilizó con Gisèle Pelicot, sino con la mujer de Rasmus. Así, el hombre habría seguido el ejemplo de su colega para violar a su esposa.
Rasmus invitó varias veces a Pelicot a acompañarlo en los actos. El marido de Gisèle acudió al menos cinco veces a su domicilio: a veces era el marido quien, delante de su amigo, abusaba a la mujer; otras, era el propio Pelicot. Sin embargo, no siempre pudieron actuar, pues la dosis no parecía ser suficiente para dormir a la mujer. Una noche, la víctima se despertó en medio de los abusos: se encontró de frente a un desconocido, Dominique Pelicot, con los pantalones bajados. Rasmus entonces le dio una excusa: había venido para hacerle fotos en ropa interior.
Violación marital en Francia: la hija y las nueras también sufrieron los abusos de PelicotUno de los expertos informáticos ha localizado un repertorio de 128 archivos en la carpeta “abusos”, donde Pelicot almacenaba las escenas de violación a Gisèle. Según ha relatado durante este martes, cada video se guardaba con el nombre o apodo del agresor, su edad y el día en el que había sucedido. Algunos duraban hasta 3 o incluso 6 horas, en las que los abusos eran constantes. Guardaba igualmente fotos de su esposa y sus hijas, así como algunos montajes amateur que realizaba de ambas.