"Oh, cómo me regocijo en este mundo, esta vida que nos es dada / este tapiz de experiencias que nos forma en seres vivos. Y aunque pueda partir, mi espíritu seguirá cantando / la canción de la vida eterna, que fluye a través de todo". Los anteriores son versos generados por la inteligencia artificial a partir del estilo de Walt Whitman. Según un estudio, muchos prefieren esas creaciones antes que las originales.

La investigación realizada por el Departamento de Historia y Filosofía de la Ciencia de la Universidad de Pittsburgh y publicado en la revista Scientific Reports reveló que los lectores no expertos no pueden diferenciar entre los poemas de poetas consagrados como William Shakespeare, Emily Dickinson, Lord Byron, Sylvia Plath y Allen Ginsberg, y los creados por ChatGPT imitando su estilo.

El estudio involucró a más de 1.600 personas que leyeron cinco poemas reales de uno de los diez poetas estudiados junto con cinco poemas generados por ChatGPT al estilo de esos poetas. Los participantes no acertaron al predecir qué poemas fueron creados por IA y cuáles por seres humanos. También les pidieron calificar la poesía presentada en términos cualitativos (ritmo, sonoridad, atmósfera), y dijeron que los de la IA eran más inspiradores, significativos y profundos que los escritos por los poetas de carne y huesos.

El fenómeno de la IA poética

“El fenómeno de la IA poética es bastante extraño", dijo Edouard Machery, filósofo de la Universidad de Pittsburgh y coautor del estudio junto con Brian Porter, un investigador postdoctoral.

Machery sugiere que la poesía generada por IA fue preferida por su simplicidad y accesibilidad. Los lectores generales pueden haber confundido la complejidad de los poemas humanos con la jerga generada por IA. "La tendencia de los modelos de lenguaje de gran tamaño a converger hacia un promedio elimina la excentricidad y rareza que a menudo caracteriza a la poesía excepcional", explicó.

Michele Elam, profesora de inglés y estudios afroamericanos en la Universidad de Stanford, y también integrante del equipo que desarrolló la investigación, expresó su preocupación de que la IA pueda alterar la relación de las personas con el arte. Elam comentó: "la literatura, incluida la poesía, es significativa en parte porque nombra nuestras realidades y nos proporciona vocabularios para describir nuestros mundos. Si sólo vemos imágenes y lenguajes altamente seleccionados en nuestras redes sociales y cultura, esto puede limitar nuestra comprensión de la realidad, recordar el pasado e imaginar el futuro".