Un hombre de 26 años fue condenado por cometer tres asaltos violentos en menos de una hora: enfrentaba una causa por haber robado un quiosco y asaltar a dos personas en la vía pública.
En una audiencia realizada este martes, la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos de Concepción, a cargo de Héctor Fabián Assad, presentó un acuerdo de juicio abreviado firmado previamente con Rodrigo Moisés Serrano. Estaba acusado de protagonizar un raid delictivo, que incluyó la utilización de armas blancas, en la ciudad de Juan Bautista Alberdi. Se le imputó haber cometido, en el lapso de 50 minutos, tres violentos robos el martes 6 de agosto.
La auxiliar de fiscal, Emilse Guevara, fue la encargada de exponer el convenio que implicó el reconocimiento de culpabilidad de Serrano.
Según la acusación, el primer hecho sucedió a las 19.40. El ladrón se hizo presente en un quiosco de calle Lucas Córdoba y Lídoro Quinteros donde, sin mediar palabras, sustrajo cinco paquetes de cigarrillos y alrededor de $5.000 de la caja de registradora del comercio.
Luego se le atribuyó que 20 minutos más tarde abordó a una joven que caminaba por la calle Marcelo T. de Alvear y le exigió el celular, produciéndose un forcejeo. La víctima se resistió y el imputado sacó un cuchillo tipo sierrita con el que la lesionó a la altura del abdomen, dándose a la fuga.
Por último, se le adjudicó que en calle Lucas Córdoba y avenida Marañón interceptó a un joven al que amenazó con un destornillador para luego robarle un celular.
Tras la lectura de los hechos y las evidencias reunidas, la representante del MPF señaló que la pena pactada con la defensa técnica es de cinco años de prisión efectiva.
Cumplidos los requisitos formales, el juez interviniente aceptó el acuerdo de juicio abreviado pleno y declaró al sujeto autor penalmente responsable de los delitos de robo agravado por el uso de arma consumado, concursando realmente con el delito de robo agravado por el uso de arma en grado de tentativa y hurto simple. Luego de la lectura de la sentencia, la cual quedó firme por la renuncia de las partes a cualquier vía recursiva, se ordenó su inmediato traslado a la unidad penitenciaria.