Los pilares para adelgazar son conocidos de manera extendida: una buena alimentación y hacer actividad física. No existe especialista que contradiga esto y la ciencia respalda aquella afirmación. Pero también existen otros factores que influyen en la pérdida de peso y esos son los momentos del día en que realizamos ejercicio.
Adelantar la cena: ¿por qué es bueno para adelgazar?Diversos estudios empíricos han advertido que una actividad física accesible y sencilla puede ayudar a adelgazar. No es necesaria una exigencia desmedida en el gimnasio para bajar de peso, ya que con caminar 30 minutos es más que suficiente. Aunque también se deben tener en cuenta factores como los horarios en que se realiza, para maximizar los beneficios a la hora de ejecutar los ejercicios.
¿Cuál es el mejor horario para hacer ejercicio y perder grasa?
Para la ciencia el mejor horario para hacer ejercicio y quemar grasa podría ser la mañana. Según el Foro Económico Mundial, en este momento del día podremos rendir más en el trabajo y estar más activos.
Una investigación realizada por la Universidad de Bath y Birmingham refuerza aquella afirmación. Para llevarse a cabo el estudio se dividieron tres grupos. En uno las personas comían su desayuno antes de entrenar; otro comía después y un grupo control no realizaba ningún cambio en sus hábitos de vida.
"Las personas que realizaban deporte por la mañana, antes de desayunar, perdían el doble de grasa que los demás», según el estudio. A su vez, mencionaron que se debe a que tienen niveles de insulina más bajos y obliga a los músculos a buscar la energía en los tejidos grasos, quemándolos más".
"El cuerpo de estas personas y sus músculos respondieron mejor a la insulina y lograron mantener unos niveles de glucosa más estables", afirman.
Otros momentos del día beneficiosos para hacer ejercicio
Sin embargo, si tus mañanas están ocupadas, otros horarios del día también pueden aportar beneficios. Hacer ejercicio a medio día podría ayudar a acelerar nuestro metabolismo, además de permitirnos desconectar un poco para regresar al trabajo más motivados. Por último, entrenar por la tarde puede ayudarnos a relajarnos, a dormir mejor y a estar más despejados, según indica el Foro Económico Mundial.