Esta nota responde a una inquietud por saber el significado del término inteligencia. Creo que la mayoría lo acepta hoy obnubilados pero sin cuestionarlo. Diré que el germen de la cibernética existe desde que el “homo Sapiens” avanzó por la necesidad de calcular que tuvo desde hace miles de años. Textos de computación hablan de muchas civilizaciones que usaron diferentes números y diferentes formas de contar, incluidos los llamados ábacos. Más conocidos en Japón y china, aunque también se usaron en otros países. Con la introducción del cero por los árabes, las matemáticas prosperaron gracias a muchos matemáticos que hicieron avanzar la ciencia en toda Europa. En cuanto a la computación, se sabe que muchos matemáticos famosos, inventaron máquinas con el propósito de acelerar las operaciones para resolver engorrosos cálculos y avanzar con el desarrollo de complejas operaciones. Entre ellos, podemos citar a Niéper, inventor de los logaritmos que llevan su nombre. Otros como Newton y Leibniz hicieron extraordinarios avances con el Cálculo Diferencial. Algunos inventaron máquinas de funcionamiento mecánico con engranajes. Una de las más importantes fue la llamada Máquina Operacional, considerada como la primera calculadora automática que logro operaciones simples hasta una cifra de 108.000. Se acepta que la computación cibernética empezó con Charles Babage en el siglo 19. En el siglo XX se lograron importantes avances con máquinas que trabajaban con tarjetas perforadas. Fabricadas por IBM Fueron usadas por algunos bancos, pero el verdadero avance de la computación se dio gracias a los aportes teóricos de Alan Turing, destacado estudioso de matemáticas, lógica y biología. Con la denominada “Prueba de Turing” empezó el interés por la Inteligencia Artificial, aunque todavía no se acuño el término. La prueba de Turing, consistía en que: Una computadora para ser tal, funcionando aislada de otro operador, debía ser capaz de convencer a esta persona de que estaba hablando con un ser humano. Fue pionero en confeccionar programas y algoritmos, pero a principios de 1900 no contaba con una tecnología capaz de responder adecuadamente a los programas que Turing había desarrollado. Las primeras computadoras funcionaban con lámparas que superaron a los disyuntores. Estos, fueron superados por transistores. Con los chips, los circuitos impresos y la nanotecnología, hoy se dispone de computadores u ordenadores de increíble capacidad de cálculos. Con todo lo dicho, debo volver a la pregunta de porque hemos dado por sobreentendido el término “Inteligencia”. Muchos de nosotros estamos sorprendidos y hemos aceptado sin cuestionar la llamada “Inteligencia Artificial”. Sin embargo, nunca se cuestiona que todos sus logros adolecen de una total falta sentimientos, emociones, empatía, solidaridad ni compasión al actuar con seres humanos. ¿Acaso sean reflejos de nuestra propia frialdad? Vemos que se promocionan robots de ambos sexos, artefactos domésticos, herramientas y automóviles. Obviamente es indudable las ventajas que aporta a la medicina, la ayuda que significa para médicos que pueden contar con enfermeros cibernéticos. Sin embargo, jamás se cuestiona la falta de un aporte afectivo para un ser humano que sufre. Tampoco se habla de la ausencia del Amor con mujeres artificiales. Tampoco se da importancia a que la delincuencia que puede cambiar rostros y copiar voces, lo cual equivocan investigaciones y hacen posible increíbles estafas. También debemos reconocer que la otra cara de la moneda es el aporte que la I.A ha significado para la industria del armamento, y poco importa el reemplazo de operarios en las fábricas. Tampoco se cuestiona la peligrosa aplicación de actuar sobre el intelecto y las aplicaciones para modificar la idiosincrasia del ser humano convirtiéndolo en zombis al servicio de egoístas intereses. En definitiva, creo que el término Inteligencia significa evitar hacer daño y condenar la violencia en la sociedad. Por lo tanto, la filosofía que debe tener un gobierno inteligente, debe ser preocuparse por el bienestar de su pueblo y evitar la maldad de una explotación salvaje e inhumana. Habrá que modificar la forma de elegir gobernantes.
Humberto Hugo D'Andrea
hdandrea95@gmail.com