Mantener la agudeza mental requiere de algunos esfuerzos, pero también de elegir aquellas estrategias que sean más efectivas para lograrlo. Una forma de hacerlo es utilizando métodos que comprendan la forma en que funciona el cerebro, entendiendo la manera en que recordamos como la que olvidamos. Así, métodos basados en principios científicos como lo es el 2-7-30, puede ayudarnos a reforzar la memoria a largo plazo.

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Ya sea para contrarrestar el deterioro cognitivo causado por el avance de la edad; para facilitar el aprendizaje de los trabajadores en la empresa o para recordar más fácilmente la información de un examen, esta regla de la ciencia es tanto una técnica de estudio como una herramienta de retención que fortalece la memoria a largo plazo. Utilizarla puede mejorar ampliamente nuestra capacidad de almacenar datos.

Los fundamentos científicos de la técnica

Los fundamentos empíricos de la regla 2-7-30 no son nuevos. Los especialistas en neurociencia comprendieron desde hace tiempo que, en lo que respecta a nuestro cerebro, olvidar no es un defecto, es una característica.

Olvidamos naturalmente los recuerdos antiguos que nuestro cerebro considera menos importantes para dar cabida a información más reciente y valiosa. Según Charan Ranganath, investigador de la memoria de la Universidad de California, Davis y autor de Por qué recordamos, la memoria es, en esencia, un proceso competitivo.

La importancia de la repetición espaciada

En un artículo del medio Inc, se hace referencia a la investigación que llevó a cabo el psicólogo alemán Hermann Ebbinghaus, quien en la década de 1880 estudió la propensión al olvido y visualizó el fenómeno con su "curva del olvido". Esta curva muestra que la retención de información disminuye drásticamente en los primeros días después de aprenderla y luego se estabiliza, con un recuerdo de solo el 20-30% después de un mes

Ebbinghaus recomendó la "repetición espaciada" como solución a esta curva del olvido. Al recordar la información en intervalos, el cerebro la etiqueta como más importante, lo que le ayuda a ganar la "competición" por el limitado espacio de memoria

¿En qué consiste el método 2-7-30?

El Método 2-7-30 consiste en repetir o repasar la información que se desea recordar en intervalos específicos: el segundo día, luego el séptimo día y, finalmente, el día 30 después de haberla aprendido inicialmente. El objetivo es que el cerebro identifique estos patrones de repetición y preste más atención a esa información, lo que ayuda a consolidarla en la memoria a largo plazo.

La clave es programar recordatorios en el calendario para las sesiones de repaso en los días 2, 7 y 30, indicaron desde Inc. Ejemplos prácticos incluyen usar tarjetas de memoria (flashcards) para vocabulario, o escribir un resumen de un libro y luego reescribirlo sin consultar las notas en las fechas de revisión.

El método 2-7-30 no es una "solución mágica". Esta práctica debe sumarse a otros hábitos como descansar adecuadamente, mantener una alimentación equilibrada (con frutas, verduras y proteínas), hacer ejercicio, practicar deportes o juegos como el ajedrez, mantener el contacto social, y aprender nuevas habilidades, ya que todo esto estimula y fortalece el cerebro.