La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, negó que Estados Unidos planee enviar tropas a su país para enfrentar a las bandas del crimen organizado, en respuesta a un informe publicado por la cadena NBC News.
“Eso no va a suceder”, afirmó la mandataria durante su conferencia de prensa matutina, al tiempo que advirtió que México no permitirá ningún tipo de intervención extranjera.
En su intervención ante los medios, Sheinbaum fue categórica: “No estamos de acuerdo con ningún proceso de interferencia o intervencionismo”. Sus declaraciones surgieron luego de que la cadena estadounidense revelara que funcionarios de la Casa Blanca habrían comenzado a planificar el despliegue de tropas y agentes de inteligencia en territorio mexicano bajo la autoridad de la CIA.
El informe difundido por el medio norteamericano indicó que la operación no era inminente, aunque ya se habrían iniciado las primeras fases de entrenamiento y conversaciones sobre su posible alcance. El supuesto plan contemplaría ataques directos contra los cárteles del narcotráfico, en especial contra laboratorios de droga y líderes criminales.
Consultada sobre el tema, Sheinbaum aclaró que su administración “no tenía información sobre ninguna incursión militar”, aunque reconoció que Donald Trump, en conversaciones telefónicas, le ofreció enviar tropas para combatir al crimen organizado.
“Siempre le he dado las gracias, presidente Trump. Pero no, México es un país libre, independiente y soberano”, enfatizó la presidenta.
Respeto a la soberanía
La mandataria recordó además que existe un acuerdo de seguridad vigente con Estados Unidos, negociado “durante varios meses”, y que se desarrolla “dentro de un marco de entendimiento claro y respetuoso de la soberanía y la territorialidad mexicana”.
Sheinbaum subrayó que la cooperación entre ambos países debe basarse en el respeto mutuo y en la colaboración institucional, sin recurrir a medidas unilaterales o de carácter militar.
Por último, la jefa de Estado rechazó las posturas que promueven una estrategia militar: “Algunos abogan por la militarización y la guerra, como ocurrió con la guerra contra las drogas. Eso no funcionó”, concluyó.