Por primera vez, el pianista español Andrés Navarro ofrecerá un recital en Tucumán. La cita será esta noche, a las 21, en el Centro Cultural Virla, donde interpretará un programa dedicado a cuatro grandes nombres de la música española: Enrique Granados, Federico Mompou, Isaac Albéniz y Manuel de Falla.

“Es la primera vez que voy a dar un concierto en Tucumán, así que estoy encantado de estar en su ciudad”, contó a LA GACETA. Aunque su debut marca un hito, no es su primera visita al país. “Es la tercera vez que vengo; antes estuve en Buenos Aires y en Córdoba”, precisó.

El programa elegido tiene un hilo conductor claro. “La característica que une a estos compositores es que en gran parte utilizan el folklore de la música popular española. Por ejemplo, Falla toma ritmos de la Jota, de la Guajira -cuando Cuba aún pertenecía a España- y del cante jondo, que es la parte vocal del flamenco. Todos ellos usan elementos del folklore y los universalizan a través de la música clásica”, explicó.

Navarro destacó que esa fusión entre lo popular y lo académico fue un movimiento artístico más amplio, compartido con compositores de otros países. “A principios del siglo XX, en Hungría, Bartók hacía algo parecido: buscaba llevar su música popular a otro nivel para que pudiera ser escuchada en todo el mundo”, dijo.

ANDRÉS NAVARRO

El pianista también recordó que su vínculo con la música comenzó de manera inesperada. “Yo empecé tocando la guitarra. Pero cuando mis compañeros hacían ejercicios de piano, yo los imitaba de oído. Hasta que una profesora se dio cuenta y dijo: ‘Este chico tiene que tocar el piano’. Así entré al conservatorio y hasta hoy”, relató entre risas.

Aunque en su familia no había músicos profesionales, el arte siempre estuvo presente. “Mi padre tocaba la guitarra y en casa se escuchaba mucha música. Pero soy el primero en dedicarme profesionalmente”, comentó.

Sobre la vida del intérprete, Navarro reconoció que detrás del virtuosismo hay sacrificio y constancia. “El público ve el resultado final, pero detrás hay muchas horas de estudio, investigación y un trabajo constante por mejorar. Es una dedicación plena”, sostuvo.

Entre sus referentes, mencionó a figuras como Martha Argerich, Nelson Goerner -con quien estudió en Ginebra- y Alicia de Larrocha, entre otros. “Son pianistas que me fascinan. Escuchar sus interpretaciones me inspira y me ayuda a analizar nuevas formas de abordar el repertorio”, señaló.

Consultado sobre el lugar que ocupa la música clásica entre los jóvenes, el pianista se mostró optimista. “El número de reproducciones en Spotify ha crecido en los últimos años. Otra cosa es el público que asiste a los conciertos, pero creo que nunca se escuchó tanta música clásica como ahora. Plataformas como YouTube o Spotify ayudan a acercar este arte, aunque no hay nada comparable con la experiencia del concierto en vivo”, dijo.

Navarro también reconoció el papel de las redes sociales en la difusión de la música académica. “Son una herramienta útil para llegar a nuevos públicos. Hay orquestas y teatros que están logrando atraer jóvenes gracias a ellas”, afirmó.

A quienes aún no se acercaron a este género, les dejó una invitación: “En el recital de esta noche van a encontrar ritmos que vienen del folklore español, una riqueza armónica distinta, y obras con una gran profundidad emocional. Es un recorrido por la diversidad de la música española”.

Finalmente, reflexionó sobre el papel de la inteligencia artificial en la creación artística. “He visto programas que pueden componer analizando estilos de muchos autores, pero el arte tiene que tener alma. La música es una expresión humana, y en eso la inteligencia artificial no puede competir. Puede ser una herramienta, pero nunca reemplazará la emoción del intérprete”, concluyó.