Kevin López regresó a Independiente luego de finalizar su préstamo en Atlético, donde encontró la continuidad y los minutos que había salido a buscar. A pesar de la floja campaña del "Decano" -que terminó 12° en la Zona B del Torneo Clausura-, el mediocampista se consolidó como titular y disputó 20 partidos en todo el año.

Su estadía en el norte estuvo atravesada por varios problemas físicos: sufrió una fractura nasal en febrero, una lesión muscular en agosto y, este semestre, el primer desgarro de su carrera, seguido de otro contra el propio Independiente. Sin embargo, cada vez que estuvo disponible, jugó.

De cara a su vuelta a Avellaneda, López fue claro en diálogo con De La Cuna Al Infierno: “Estoy con ganas de pelear un puesto. Prefiero quedarme que ser cedido. Me siento más maduro”. También destacó que el rodaje en Tucumán le permitió retornar “con más confianza”, dijo.

La Secretaría Técnica del "Rojo" ya le expresó su conformidad con su crecimiento y aseguró que será considerado. Aunque aún no habló con Gustavo Quinteros, el volante tiene una decisión tomada: quiere quedarse, competir y transformar los dos años de préstamos consecutivos en una oportunidad real dentro del plantel profesional.