El presidente Javier Milei encendió un nuevo frente diplomático al confirmar que su gobierno mantiene activas negociaciones con el Reino Unido para conseguir el levantamiento del veto que impide a la Argentina adquirir armamento británico. Esta restricción ha estado vigente desde la Guerra de Malvinas en 1982, y su posible flexibilización marca un giro histórico en las relaciones bilaterales.
La revelación fue difundida por el diario londinense The Telegraph, que este jueves citó declaraciones del mandatario argentino. Milei ratificó la gestión, vinculándola a su visión geopolítica de la nación: “No hay potencias mundiales sin poder militar. Ningún país cuenta en el contexto internacional si no puede defender sus fronteras”.
La normativa británica actual es clara: el Reino Unido debe “rechazar licencias para la exportación y el comercio de bienes que se consideren que mejoran la capacidad militar argentina”. Romper con este statu quo sería un movimiento sin precedentes en las cuatro décadas transcurridas desde el conflicto del Atlántico Sur.
Aunque fuentes del gobierno británico negaron al diario que existan negociaciones específicas para flexibilizar las limitaciones, el medio londinense sí menciona fuentes que confirman conversaciones bilaterales vinculadas a temas de defensa, evidenciando un acercamiento en el ámbito militar.
El plan de Milei, divulgado por el medio inglés, incluye un ambicioso viaje a Londres en 2026, específicamente entre abril y mayo. De concretarse, sería el primer presidente argentino en visitar Gran Bretaña en 28 años.
Durante su visita, el presidente argentino tendría previsto reunirse tanto con el primer ministro actual, Keir Starmer, como con líderes de la oposición, incluido el nacionalista Nigel Farage, buscando tender puentes con todo el espectro político británico.
Respecto a la soberanía de las Islas Malvinas, un tema central en la relación bilateral, Milei sostuvo que la recuperación debe realizarse exclusivamente a través de vías diplomáticas.
El mandatario vinculó el levantamiento del veto de armas con la necesidad de demostrar madurez en la relación bilateral: “Creo que la mejor manera de demostrar la voluntad por parte de Argentina es demostrar que también tenemos una relación comercial adulta”.
La llegada de los aviones de combate F-16 marcó un punto de inflexión y generó nuevos desafíosMilei no descartó la posibilidad de forjar una alianza militar completa con Gran Bretaña como parte de la reactivación de las relaciones. En su estrategia, también destacó el rol de la política internacional y la intervención de figuras como Donald Trump, alineando a Argentina en el bloque occidental liderado por Estados Unidos.
Milei sugirió que replicar condiciones que “garanticen un alto nivel de vida” en las Islas podría hacer que los habitantes estén “más dispuestos a reconocer ese territorio como argentino”.
Antecedente reciente
La política de modernización de las Fuerzas Armadas argentinas ya tuvo un capítulo reciente con la llegada de los primeros aviones de combate F-16 Fighting Falcon, adquiridos a la Real Fuerza Aérea de Dinamarca y modernizados bajo el estándar MLU (Mid-Life Upgrade).
Estos aviones, si bien son aeronaves fabricadas en los años 80, representan un salto cualitativo en la capacidad de la Fuerza Aérea. Documentación oficial indica que la Argentina deberá pagar U$S 301 millones por el paquete que incluye las aeronaves, motores adicionales, repuestos y sistemas de soporte, lo que demuestra la voluntad del gobierno de Milei de reforzar su capacidad militar.