WASHINGTON/HONOLULU, Estados Unidos.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, regresará a Washington mañana para realizar un último esfuerzo que permita alcanzar un acuerdo con el Congreso para evitar, o al menos retrasar, el denominado "abismo fiscal".
El "abismo fiscal" generaría alzas de impuestos y recortes del gasto público a partir de la próxima semana si es que no se alcanza un acuerdo.
Ningún proyecto de ley específico sobre el "abismo fiscal" se encuentra actualmente en el programa del Senado o de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, que regresarán el jueves a sus actividades después de las fiestas de Navidad.
Los inversores están siguiendo de cerca las conversaciones y se encuentran preocupados de que si no se alcanza un acuerdo la economía estadounidense podría entrar en una recesión.
Asesores y miembros del Congreso han dicho que el Senado, controlado por los demócratas, podría aprobar una medida de último minuto que evite los recortes de gastos y gran parte de los aumentos de impuestos.
Sin embargo, para que sea aprobado en la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, cualquier proyecto de ley que aumente los impuestos sería necesario un inusual voto bipartidista.
Los 191 congresistas demócratas de la Cámara de Representantes tendrían que votar en bloque junto a por lo menos 26 republicanos para obtener una mayoría y aprobar un proyecto de ley que incluya aumentos de impuestos a los estadounidenses más ricos, una de las exigencias clave de Obama.
Algunos de estos 26 votos republicanos que se necesitarían podrían llegar de los 34 congresistas de ese partido que no se presentaron a la reelección o que fueron derrotados en los comicios de noviembre, por lo que ya no tienen que preocuparse de alguna consecuencia política. (Reuters)