VIENA Y TEHERAN - Irán pretende ampliar y mejorar su controvertido proceso de enriquecimiento de uranio, según se desprende de una carta que el gobierno de Teherán envió la semana pasada al Organismo Internacional de Energía Atómica en Viena, a la que tuvo acceso dpa.
Según la misiva iraní, Teherán pretende instalar en su planta nuclear de Natanz más centrífugas de un tipo moderno. A juicio de los expertos, esto permitiría a Irán acelerar notablemente su proceso de enriquecimiento de uranio.
Muchos países sospechan desde hace años que Irán utiliza su programa nuclear para impulsar la construcción de bombas atómicas.
Estados Unidos señaló que la noticia no lo tomó por sorpresa y urgió a Irán a cumplir con sus compromisos internacionales.
"La instalación de nuevas centrífugas de avanzada constituye una nueva escalada y una continuada violación", aseveró el portavoz de la Casa Blanca Jay Carney.
Cruces con Estados Unidos
Por otra parte, un alto jefe del Cuerpo de Guardianes de la Revolución de Irán afirmó ayer que se preparan para demandar a Estados Unidos ante entidades internacionales por la entrada ilegal de aviones espía no tripulados (drones) en su espacio aéreo.
Según la legislación internacional, la entrada de cualquier tipo de avión espía en el espacio aéreo de otro país está prohibida, señaló el general Mohamad Reza Yazdi, citado por la agencia oficial iraní, IRNA.
Basado en esta norma, Teherán presentará una demanda ante entidades internacionales, una vez que se completen los trámites pendientes con la Presidencia y el ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, reveló el responsable legal de los Guardianes, cuerpo militar especial de defensa del régimen islámico.
"Actos ilegales"
"El mundo entero es testigo de los actos ilegales llevados a cabo por Estados Unidos", indicó Yazdi, en referencia a las reiteradas violaciones del espacio aéreo de Irán por aviones no tripulados espía estadounidenses denunciadas por Irán, que asegura haber derribado y capturado varios de ellos, de los que incluso mostró imágenes, informó la agencia EFE.
El pasado 4 de diciembre, después de que los Guardianes de la Revolución mostraran imágenes de un avión no tripulado Scan Eagle de fabricación estadounidense abatido por las fuerzas iraníes, el canciller de Irán, Ali Akbar Salehi, dijo que el aparato era una prueba válida para emprender acciones legales contra Washington en los tribunales internacionales por violación de su espacio aéreo.
Teherán, según Salehi, advirtió entonces a Washington de que darían una respuesta contundente a ese país si los aviones espía no tripulados norteamericanos seguían violando el espacio aéreo iraní. (Télam y DPA)