Estamos en presencia de un nuevo Atlético, y para justificarlo nada mejor que una vieja frase de Ricardo Rodríguez que pintó de pies a cabeza a su equipo hasta hace poco: "al 3-2 lo firmo todos los partidos". Sus jugadores no solo no marcaron goles durante más de tres fechas en el torneo sino que tampoco los recibieron. En el análisis, la crítica hacia los delanteros no puede ir más allá de lo que lo hace el elogio con el arquero y los defensores.

"Antes sacábamos diferencia arriba y nos convertían fácil. Ahora es al revés", simplifica el concepto Diego Calgaro, que seguramente será titular el domingo. En otras palabras, lo que antes era valorable en el "decano", en los últimos partidos se transformó en su principal deuda: los goles. "Luis (Rodríguez) es un jugador muy importante y no está convirtiendo. Sus compañeros (los delanteros) no están pasando un buen momento, pero hay que apoyarlos", pide César Montiglio.

La situación es extraña: Atlético es el tercer equipo más goleador con 31 tantos y registra el tercer partido con más tantos del torneo con siete, en el 5-2 ante Defensa. Por delante quedaron el 5-3 de Crucero a Patronato y el 6-2 de Brown a Merlo. "Somos uno de los equipos más goleadores del torneo y eso marca algo. Esta racha no significa nada", calma a la duda Cristian Lucchetti, que sigue confiando en su ofensiva, justamente, uno de los principales responsables de que abajo el cero sea un aliado del "decano". Tres partidos seguidos con el arco en cero era algo que no se daba desde el año pasado, cuando "Laucha" estuvo 344 minutos sin permitir un gol, algo extraño de este equipo acostumbrado a sufrir: tiene 25 goles en contra.

"Se ha cuestionado mucho a mis defensores, (Deivis) Barone y (Líder) Mármol, y hoy los que dijeron eso se tienen que retractar. Los jugadores cumplieron y tenemos un equipo defensivamente muy fuerte", agregó Ricardo Rodríguez, que algo de razón tiene: la defensa comenzó el año firme, sobre todo de arriba: en el año recibió sólo dos goles de cabeza. Sin embargo, desconcentraciones como las que sucedieron ante Ferro y descalabros como los de Defensa, la volvieron a poner bajo la lupa.

El asterisco de este compilado es el partido contra San Martín que, lejos del 0-0, finalizó 3 a 1 pero como contra Gimnasia (J), si hubiese empatado y ganado en los penales, no habría repercutido.

¿Hasta cuando seguirá así? ¿Cuál es su verdadera versión? Difícil saberlo. ¿Si el domingo sirve 0-0?: la respuesta es no y menos contra Central, opinan en el plantel.