CIUDAD DEL VATICANO.- El cardenal británico Keith O'Brien, acusado de haber tenido un "comportamiento inapropiado" hacia otros religiosos, abandonará Escocia durante unos meses para transitar un período de penitencia, informó el Vaticano.
En un comunicado de prensa, la Santa Sede indicó hoy que, por decisión del Papa Francisco, O'Brien "dejará Escocia dentro de pocos días, para transcurrir algunos meses de renovación espiritual, oración y penitencia".
"Cualquier decisión relativa al destino futuro del cardenal se concordará con la Santa Sede”, concluye el escueto comunicado, que publicó La Stampa, en su sitio Vatican Insider.
Las acusaciones contra O'Brien, de 75 años, se remontan a la década de los 80, y fueron resentadas por el embajador del Vaticano en Gran Bretaña, Antonio Mennini, a principios de febrero, una semana antes del anuncio de la renuncia de Joseph Ratzinger a la cátedra de San Pedro.
El 25 de febrero, el entonces papa Benedicto XVI aceptó su renuncia al gobierno pastoral de Edimburgo por ese motivo. El cardenal anunció días más tarde que no participaría en el cónclave para elegir al sucesor de Benedicto XVI por ese motivo, lo que fue aceptado por la Santa Sede.
El 3 de marzo, pocos días antes de que comenzara el cónclave, O'Brien pidió perdón al admitir que su conducta sexual estuvo "a veces" por debajo de los estándares que se esperaban de él "como sacerdote, arzobispo y cardenal".
Un hombre de 50 años, casado y con hijos, lo acusa de haber abusado sexualmente de él cuando era estudiante en un seminario y tenía 19 años. (Télam-LA GACETA)