David Brough y Dominique Patton - Agencia Reuters
LONDRES/PEKIN.- Una caída en los precios del azúcar podría ganar terreno pronto ante un exceso en la oferta, debido a que uno de los mayores importadores mundiales, China, podría reducir sus compras tras un fuerte salto en las existencias.
Los inventarios de azúcar de China se más que duplicaron la temporada pasada, lo que hizo que muchos proyecten una significativa caída en las compras en el 2012/13.
"Si China siguiera comprando grandes toneladas de azúcar, ello sería una señal alcista. Pero creo que las importaciones se desacelerarán a un mínimo", dijo Robin Shaw, analista de azúcar de la correduría Marex Spectron basada en Londres.
Los elevados precios domésticos en China han ofrecido un fuerte incentivo para que los compradores del sector privado importen azúcar en el mercado mundial rebosante de un superávit de suministros y que está ahora cotizando a niveles mínimos en casi tres años.
Los futuros del azúcar sin refinar en los Estados Unidos tocaron 16,81 centavos por libra el 16 de este mes, su menor nivel para un contrato referencial desde julio de 2010, de acuerdo con los reportes del mercado.
Grandes cosechas de caña en productores clave como Brasil, Tailandia, Australia y México han generado un sustancial superávit mundial de azúcar esta temporada. El mayor exportador Brasil está actualmente cosechando sus abundantes cultivos de caña en medio de un clima ideal.
Cómo está el mercado
El acopio de existencias de China en el período 2011/12 eliminó del mercado un sustancial obstáculo del superávit global de esa temporada.
Operadores coincidieron que es improbable que otros importantes compradores como Indonesia cumplan un rol similar esta temporada, dejando al mercado inundado de suministros.
La Organización Internacional del Azúcar pronosticó previamente este año un superávit mundial de 8,53 millones de toneladas en la campaña 2012/13, superando el excedente de 6,48 millones de toneladas de la temporada anterior.
Algunos operadores coincidieron en afirmar que las autoridades chinas seguramente ejercerían cierta presión entre los importadores privados, con el fin de evitar que compren azúcar.
El gigante asiático ha mantenido los precios domésticos elevados. Con esta estrategia, China busca proteger a sus productores y abordar una amplia brecha entre los ingresos rurales y urbanos.
Los productores chinos enfrentan uno de los mayores costos en la producción de azúcar del mundo a cerca de 30 centavos por libra, comparado con aproximadamente los 18-19 centavos por libra que se pagan en Brasil.