BUENOS AIRES.- Unos 200.000 trabajadores argentinos tendrán que pagar el Impuesto a las Ganancias y otros 150.000 volverán a estar alcanzados por el tributo cuando entren en vigencia los aumentos salariales pactados en las paritarias 2013.
Según destaca Ambito.com, esto sucederá porque la mejora anunciada por el Gobierno en abril de este año, de subir el mínimo no imponible del gravamen en un 19% promedio, es menor al promedio de alzas salariales del 24% que se instrumentarán este año cuando terminen los cronogramas de aplicación de los incrementos. Así, sectores como los camioneros, mineros, petroleros, bancarios, trabajadores de las terminales automotrices y operarios de grandes empresas metalúrgicas y siderúrgicas estarán todos alcanzados por el Impuesto a las Ganancias. Pero, además, rubros como trabajadores de la alimentación, choferes de media y larga distancia, ferroviarios, plásticos, Luz y Fuerza, telefónicos y la mayoría de los operarios de los sectores industriales también estarán alcanzados por primera vez o volverán a tributar luego de haber percibido cierta mejora en los salarios tras la suba del mínimo no imponible que comenzó a aplicarse en la liquidación de los salarios de mayo.
Prácticamente la mejora de ese mes dejará de tener influencia en la mayoría de los salarios de trabajadores más altos hacia fin de año, cuando los incrementos de sueldos negociados en las últimas paritarias ya estén aplicados. Incluso la situación será aún peor hacia marzo, cuando se hayan liquidado los premios de fin de año que algunos de los sindicatos más importantes negociaron para cerrar 2013. En el caso puntual de los camioneros de Hugo Moyano, incluso se estipuló en el acuerdo cerrado ayer que el "plus" que se tendrá que pagar en la liquidación de los salarios de diciembre próximo se debe a la presión que Ganancias tendrá en el salario de los choferes luego de la aplicación de los aumentos de paritarias.
Con los incrementos salariales, el 30% de los trabajadores en blanco y que están dentro de los convenios colectivos de trabajo nuevamente serán alcanzados por el impuesto. Según había calculado el Gobierno, hacia mayo el porcentaje de los "liberados" del impuesto llegaba al 82,5%, valor que volverá a caer con la aplicación de las nuevas paritarias.
En abril pasado, el Ejecutivo había calculado que la pérdida de recaudación por haber llevado los nuevos mínimos no imponibles a $ 6.938 para los solteros y $ 9.597 para los casados con dos hijos llegaría a los $ 8.000 millones anuales. La cifra obviamente se acortará con los nuevos incrementos de sueldos. Pero además habrá que tener en cuenta que el dinero liberado en su momento ayudó a que mejore el nivel de consumo interno, lo mismo que las alzas salariales que quedarán luego de la suba negociada en paritarias. Esto a su vez apalancaría mejoras en la recaudación del IVA, variable que ya empezó a observarse en los datos de recaudación de mayo pasado, donde por este tributo subió un 28%, un punto porcentual más que el promedio del 27% de alza de todos los ingresos públicos el mes pasado. Es de esperar además que en los próximos meses el aumento en este tributo sea aún mayor, junto con Ganancias, obviamente.
Siguiendo la lógica de los aumentos negociados en las últimas paritarias, y tomando el ejemplo de un trabajador que perciba mensualmente, sin cargas de familia, unos $ 10.000, si recibe un aumento de $ 2.500 (24% en las últimas negociaciones paritarias y similar a la inflación del año pasado) obtendrá en la mano unos $ 1.840. El resto, $ 660, le será retenido por la empresa por Ganancias, con lo que más de una cuarta parte del aumento negociado terminará nuevamente en las arcas públicas. Parte del resto volverá a ingresar por el IVA, cuando ese dinero termine aumentando el consumo interno, ya que se trata de parte de la población con bajo nivel de ahorro.
Muchos gremios calculaban originalmente hacia marzo de este año, incluyendo los dos titulares de las CGT, Moyano (opositor) y Antonio Caló (oficialista) que para que las subas salariales de paritarias no tuvieran un impacto negativo por Ganancias el alza debería haber sido de hasta el 50%, llevando el nuevo mínimo a unos $ 15.000 mensuales. Con esto, aseguraban, hubiera existido una mejora real del salario tomando en cuenta la inflación acumulada en el año pasado (cuando no mejoró Ganancias) y los primeros meses de este ejercicio. Ahora todas las esperanzas están puestas en que el Gobierno anuncie que la liquidación de los aguinaldos de mitad de año no estará alcanzada por el tributo.