El Mundial de Brasil 2014 está cerca, muy cerca para los tucumanos. Los fanáticos de la provincia están juntando moneda a moneda, recortan las vacaciones y sufren porque aún no tienen las entradas para apoyar a la Selección. Mientras ellos se angustian, los integrantes de las barrabravas de Atlético y San Martín realizaron  las gestiones para estar en el certamen que se disputará a partir del 13 de junio.

Ambos grupos están haciendo las diligencias de manera separada. La Inimitable, la barra de los “decanos”, se mueve de un lado para otro para concretar su sueño. Por ahora, hacen averiguaciones en tribunales, ya que varios de sus líderes tienen causas pendientes con la Justicia y aún no saben si les permitirán abandonar el país. Por el otro, esperan que sus amigos de Huracán les consigan las entradas prometidas para poder ingresar a los estadios.

El panorama de los “santos” es completamente diferente. La Banda del Camión y La Brava, las más poderosas, al ser integrantes de Hinchadas Unidas Argentinas, deben recorrer un camino mucho más corto. Un vocero del grupo le dijo a LG Deportiva que estiman que 100 hinchas viajarán a Brasil, pero que sólo tendrán 20 entradas por partidos, por lo que no les quedará otra que turnarse para ingresar al estadio.

Las entradas, un problema

La financiación de los viajes es otro de los inconvenientes que deben afrontar los barras tucumanos. “El problema no es el traslado, sino conseguir las entradas. Hay muchas chances de tenerlas. Nuestro escollo es que no tranzamos con nadie. No seremos bolseros por unas entradas”, cuenta un referente de La Inimitable.

El panorama de los “santos” es completamente diferente. “El problema de las entradas ya está resuelto. Ahora comenzaremos a buscar aportes privados para poder estar en Brasil sin ningún problema. Estamos bien relacionados a nivel nacional, otros no y eso juega en contra”, dijo un referente de La Ciudadela que no descarta que en las próximas semanas aparezcan banderas con nombres de personas o empresas en el estadio.

Historia y algo más

Tucumán es el reflejo de lo que ocurre a nivel nacional con el tema de los viajes a Brasil. Los barras que integran Hinchada Unidas Argentinas (HUA) tienen casi todo resuelto. Realizaron un acuerdo con la torcida de Inter y serán ellos los que los recibirán en Porto Alegre y según afirmaron, les conseguirán más entradas cuando la Selección juegue en esa ciudad contra Nigeria, ya que por ahora tienen 300 tickets por encuentro. En la vereda del frente se ubican los grupos de violentos que se enfrentaron con la agrupación impulsada por dirigentes kirchneristas.

En este panorama, los barras “santos” corren con una importante ventaja. Ellos ya tuvieron la chance de estar en Sudáfrica 2010 por sus contactos con HUA. Pese a que Sergio “Flay” Roldán, líder de La Banda del Camión, fue detenido y luego deportado por las autoridades de ese país, sus compañeros de viaje sí pudieron alentar al equipo de Diego Maradona. Los de La Inimitable, en cambio, no aceptaron las condiciones que les habían impuesto y, como hicieron otros grupos, prefirieron romper la alianza. Algunos, como ellos, se quedaron en casa. Los que viajaron  no la pasaron muy bien en ese país. Mucho tuvo que ver la suerte de Héctor “Bebote” Álvarez, el líder HUA, fue deportado junto a Roldán. Sus seguidores  no obtuvieron lo que les habían prometido: entradas y apoyo logísticos -alojamiento, traslados y comidas- y no dudaron ni un instante en romper lanzas con la agrupación. Uno de ellos fueron los hinchas de Huracán, que hoy se están moviendo solos para poder llegar a Brasil.

Un dilema

Si los hinchas comunes no saben cómo viajar, las autoridades de Seguridad de la Nación todavía no tiene nada definido sobre cómo harán para controlar a los barras que ya les sacaron claras ventajas.  Y esta posibilidad surge justo cuando Diego Rodríguez, hermano de la Ministra  María Cecilia Rodrígiez, quedó involucrado en el escándalo que se desató por la reventa de entradas en River.

“Me imagino que en las próximas semanas habrá mayores precisiones sobre cómo nos manejaremos a nivel nacional. Este es un certamen muy especial, ya que muchísimos harán hasta lo imposible para conseguir estar ahí”, explicó el comisario Jorge Díaz.

El responsable de Seguridad Deportiva de la Policía, que participa habitualmente de las reuniones del organismo nacional, espera que Brasil aplique el derecho de admisión a los simpatizantes violentos. “De todas maneras será muy difícil hacer un control sobre quién cruza la frontera del país. Hay muchos lugares donde pueden ingresar a ese país”, concluyó.