Además del vicepresidente Amado Boudou, el juez Federal Ariel Lijo procesó a otras cinco personas, que habrían tenido diversos roles en la compra de la imprenta “Ciccone Calcográfica”.

José María Núñez Carmona, amigo y socio del vicepresidente y Alejandro Vandebroele (a quien Boudou negó conocer) habrían tenido un rol activo en esta operatoria. El primero habría comprado la empresa quebrada a través de la sociedad “The Old Fund”, que presidía el segundo. El objetivo, fundamentó Lijo en su resolución, era “contratar con el Estado Nacional la impresión de billetes y documentación oficial”.

Núñez Carmona habría intervenido en toda la operatoria en como privado, realizando aquellos negociados que que Boudou no podía realizar por su cargo. Sin embargo, como la relación entre ambos era pública, Vandenbroele cumplió el rol de comprador de la imprenta, a través de “The Old Fun”, consideró Lijo.

Nicolás Ciccone, dueño de “Ciccone Calcográfica”, habría participado en las reuniones en las que se acordó la venta del 70% de la imprenta a “The Old Fund”, a cambio de que el vicepresidente “realice los actos necesarios para salvar la empresa que se encontraba en quiebra”.

“Específicamente, los elementos probatorios demostraron que una vez que se decretó la quiebra de la empresa ‘Ciccone Calcográfica’ el día 15 de julio del año 2010, Nicolás Ciccone buscó un contacto político que lo ayude a salvar su empresa. En ese contexto, su yerno Guillermo Reinwik consiguió, a través de Gabriel Bianco, una entrevista con el Ministro de Economía de ese momento Amado Boudou”, expresó Lijo en el procesamiento.

El sexto procesado es Rafael  Resnick Brenner, Jefe de Asesores de AFIP, quien había realizado un dictamen en el que se inclinaba a favor de “Ciccone Calcográfica”, para la concesión de un plan de pagos ilegal, que incluía la quita de intereses, honorarios y multas. Ricardo Echegaray, titular del órgano recaudador, rechazó de puño y letra el dictamen, porque no se ajustaba a la ley.

“Su renuncia es impostergable”

 El vicepresidente del bloque radical de Diputados, Miguel Bazze, advirtió que el procesamiento de Amado Boudou en la causa Ciccone amerita su inmediata dimisión.

“Es impostergable la renuncia de Boudou, su situación se ha vuelto insostenible”, aseveró Bazze en un comunicado.

Según el legislador opositor, “los argentinos no merecemos tener un vice con un procesamiento de esta naturaleza, es un agravio para el conjunto de la sociedad que presida el Senado de la Nación, y más aún que represente a los argentinos en el exterior”. 

Patraña

Cabe recordar que Boudou, de 51 años negó haber cometido algún acto de corrupción cuando se presentó a declarar ante el juez.  Se trata de una “falacia” y de una “patraña”, señaló en aquel momento. 

Boudou no habló de dar un paso al costado, y al contrario redobló la apuesta al sostener que otras cosas estaban en juego. “Lo que está en juego sobre todo desde la llegada (en 2003) de Néstor Kirchner y de Cristina Fernández  es si el poder está en el pueblo o en muy pocas manos que toman las decisiones”. (DyN y DPA)