BUENOS AIRES.- El adagio esta dando mucho que hablar. Más que por el baile en si, lo que esta levantando temperatura en la pista del Bailando, son los besos que algunos participantes han osado darse.
Este fue el caso de Karina Jelinek, que se tomó muy en serio todas las indicaciones de sus coachs, y finalizó su rutina, dándole un fogoso beso a su compañero Maxi Diorio.
Con este candente final, la modelo se despide del Bailando en el cual compite hace varios años, pero el que nunca pudo ganar, según ella, “por no estar acomodada”. Los compromisos laborales le impedirán a Karina seguir en el certamen, que por momentos, la vio brillar.