Los comerciantes no ven las horas de que las máquinas comiencen a trabajar. Saben que durante el tiempo que duren las obras, alrededor de cuatro meses según las estimaciones oficiales, las ventas podrían caer sustancialmente; pero reconocen también que quien no arriesga difícilmente gane después. Por todo esto, consideran positivo que en la calle Buenos Aires primera cuadra se vayan a ensanchar las veredas para dar prioridad al tránsito peatonal.

“Para mucha gente el circuito de compras se termina en la calle 24 de Septiembre, donde finaliza la peatonal Muñecas. Tenemos muchas expectativas con este proyecto, creemos que los clientes van a sumar esta cuadra a su recorrido habitual”, dijo esperanzada María del Mar Rivero, encargada de una tienda de lanas y artículos para tejer. La joven cree también que las ventas en ese local se podrían extender durante todo el año, y no sólo en el invierno como es habitual.

Mirando detenidamente, esa cuadra, hoy caótica por el intenso tránsito vehicular, comprime numerosos rubros comerciales: ropa para hombre, mujeres y niños; herboristerías, una óptica, artículos de peluquería, una panadería... También hay una moderna galería y otra que pasa casi desapercibida, en la acera opuesta.

Juan Manuel Pérez, propietario de un reconocido local de artículos de peluquería y belleza, contó que el proyecto para revalorizar la cuadra tiene al menos una década de antigüedad. “Es algo que venimos persiguiendo hace mucho tiempo, 10 años por lo menos, pero se le dio prioridad a la peatonalización de Congreso primera cuadra. Enhorabuena que se ponga en marcha ahora”, festejó el comerciante. Según Pérez -y este es también su deseo- la calle terminará siendo peatonal, integrándose a la Muñecas.

Esa es justamente una pregunta que queda en el aire: ¿por qué no hacerla peatonal directamente? Según el arquitecto Luis Lobo Chaklián, subsecretario de Planificación Urbana municipal, porque demandaría un monto mucho más elevado de dinero. “Del modo en que lo planteamos, con pavimento articulado, permite que en el futuro se modifique y sea peatonal. Pero en este momento habría que hacer una gran obra de ingeniería para el desagüe pluvial, porque esa calle no tiene imbornales. Demandaría unos $ 6 millones adaptar la calle para hacer un solo corredor con la peatonal Muñecas”, justificó el funcionario. De todos modos, Lobo Chaklián no descarta que pueda ser peatonal en determinadas horas del día y que sea abierta al tránsito a la noche, algo que todavía hay que evaluar.

El tránsito
Quienes transitan en auto por Buenos Aires primera cuadra saben que, en los horarios pico, es un calvario. Como no hay otra salida, todos los vehículos bajan por calle 24 de Septiembre, que también colapsa. Con esta nueva modificación, entonces, ese flujo irá a la calle Crisóstomo Álvarez, que tampoco da abasto: según los datos que recabó una consultora privada para la Municipalidad capitalina, 173 ómnibus circulan por hora en esa calle, cifra que no contempla ni taxis ni vehículos particulares.

“Con el futuro plan de transporte público (aún no tiene una fecha de lanzamiento) vamos a reorganizar los recorridos y se va a descomprimir esa calle. De todos modos, nuestro objetivo sigue siendo desalentar el uso de vehículos particulares en el área céntrica y buscar que la gente entre caminando al microcentro”, finalizó Lobo Chaklián.

La modificación de la calle Buenos Aires comenzará en dos semanas según anunció la Municipalidad. Ambas veredas, que tienen 1,5 metro, pasarán a tener 3 metros, con lo que la calle se reducirá a un sólo carril de 3,85 metros de ancho. Además, se cambiarán las luminarias por farolas coloniales y se revestirá el piso de las nuevas veredas con granito.