Para conocer el estado sanitario de los lotes cañeros, los especialistas de la sección Fitopatología de la Eeaoc, ingenieros Claudia Funes y Diego Henríquez, realizaron evaluaciones y monitoreos en lotes comerciales y parcelas experimentales de caña de azúcar.

Entre las principales enfermedades evaluadas se destacan: “roya marrón” (Puccinia melanocephala); “carbón” (Sporisorium scitamineum); “estría roja” y “polvillo” (Acidovorax avenae); “escaldadura de la hoja” (Xanthomonas albilineans); “Pokkah Boeng” (Fusarium moniliforme); “mosaico de la caña de azúcar” (Sugarcane mosaic virus y Sorghum mosaic virus) y “mancha parda” (Cercospora longipes), entre otras.

Durante septiembre, octubre y noviembre de 2014, en Tucumán se presentaron condiciones ambientales óptimas para la manifestación de “carbón”, señalaron los especialistas. Las temperaturas cálidas y la baja humedad relativa en muchas áreas cañeras provocaron la aparición de ‘látigos’ característicos de esta enfermedad en variedades susceptibles cultivadas; también se observaron manifestaciones del patógeno en LCP85-384 y TUCCP77-42 en algunos lotes en el área cañera. En las zonas Noreste y Este de la provincia se observó la presencia de “estría roja”, acompañada en algunos casos de “polvillo”, principalmente en la variedad susceptible TUCCP77-42, con niveles bajos de incidencia.

Por otra parte, desde enero se detectan afecciones debidas a “roya marrón” en caña planta y socas jóvenes, principalmente en LCP85-384 (susceptible). Asimismo, las áreas con mayores severidades fueron las pedemontanas y el Sur de la provincia, donde las condiciones ambientales óptimas para la manifestación de este patógeno se presentaron desde mediados de enero y continúan hasta hoy.

Debido a las condiciones de excesiva humedad acumulada en los perfiles de suelo en muchas áreas cañeras de Tucumán, se observó también la presencia de “Pokkah Boeng” en variedades comerciales.

Aunque el método más eficiente para controlar las enfermedades en caña de azúcar es el uso de variedades resistentes, los especialistas de la Eeaoc destacan la necesidad de realizar constantes monitoreos para conocer el estado de los cañaverales.