BUENOS AIRES.- Un cambio de escenario repentino y una decisión del electorado británico a favor de separarse de la Unión Europea (Brexit) que nadie esperaba.

“Ni los más pesimistas europeos preveían este desenlace”, comentó en dialogo con Agrofy News Nelson Illescas, representante del Instituto para las Negociaciones Agrícolas Internacionales (INAI).

En este sentido, desde la Fundación INAI explicaron que, en respuesta a esta situación sin precedentes para los europeos, los presidentes del Consejo, Parlamento y Comisión Europea realizaron un comunicado, a través del cual solicitaron a Gran Bretaña hacer efectiva su salida lo antes posible para evitar que se prolongue la incertidumbre. Igualmente, hasta tanto la retirada no finalice, el Reino Unido permanece como miembro de la UE con todos los derechos y obligaciones que eso implica.

“La incertidumbre pasa también por el camino que pueden adoptar otros países dentro de la Unión Europea. Una vez conocido el resultado, diferentes líderes nacionalistas de países como Francia, Holanda e Italia han reclamado que se replique el proceso de referéndum llevado adelante en Inglaterra”, comentó Illescas y agregó: “El Brexit ha sido una acción riesgosa para Inglaterra, ya que se presenta la posibilidad de que Escocia e Irlanda del Norte ahora busquen independizarse del Reino Unido, para seguir dentro de la UE”.

Uno de los mayores interrogantes surgen respecto de cómo puede verse afectada la política comercial de Inglaterra. “Como primera medida, el hecho de dejar de pertenecer al mercado único de la UE, llevará a que necesariamente cree un nuevo marco normativo en su relacionamiento con ellos y luego determinar el rol que asumirá ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) como país independiente”, comentó Illescas.

Así es que tendrá que renegociar posiciones dentro y fuera del bloque y deberá decidir, entre otras cuestiones: * Nivel de subsidios a los agricultores que solicitará; * Aranceles y cuotas que aplicará (definidos actualmente a nivel regional); * Normativa sanitaria que adoptará (si seguirá o no con los parámetros europeos vigentes); * Acuerdos/negociaciones con terceros países: qué respetará y cuáles no. “Este trabajo de definiciones y negociaciones no será sencillo ni rápido y dependerá de las voluntades de los actores involucrados en cada caso (que son muchos). Todo esto tendrá efectos en su comercio”, explicó Illescas.

Relación Mercosur-UE

En el promedio entre 2012 y 2015, la Unión Europea, en su conjunto, representó el 17% de las exportaciones agroindustriales de Argentina, con un promedio de U$S 6.429 millones al año. También en dicho período, las ventas al Reino Unido fueron de U$S 666 millones, logrando una participación del 1,7% del total de las exportaciones agropecuarias de Argentina, siendo la harina de soja el principal producto.

En tanto, sobre si podía trabar las negociaciones entre el Mercosur y la UE, Illescas comentó: “Obviamente ha generado un cimbronazo importante, pero la UE cuenta con instituciones fuertes que le permiten hacer frente a este tipo de acontecimientos. Hasta el momento, los planes de trabajo en negociaciones no cambiaron”. (Especial)