La raza Braford tiene una inserción privilegiada en cuanto al desarrollo genético que llevan adelante en la cabaña la Asunción, de capitales tucumanos, pero ubicada en la localidad El Jardín, provincia de Salta, en el límite noroeste de Tucumán. LA GACETA Rural dialogó con el productor Alberto Colombres Garmendia, presidente del establecimiento ganadero y titular de la Asociación Braford Argentina.

- ¿Por qué no avanza el proyecto para que Tucumán se convierta en un importante Centro de Terminación de Terneros en el NOA? ¿Faltan inversiones, leyes y normas, incentivos fiscales, créditos?

- En los últimos 12 años, la ganadería en nuestro país tuvo un gran retroceso ya que se perdieron 10 millones de cabezas, además de que los mercados internacionales a donde exportábamos nuestra carne se cerraron. Pasamos de exportar 800 toneladas anuales a tan solo 200. Y todo eso sucedió en un contexto internacional favorable, ya que el consumo de carne a nivel mundial sigue creciendo.

En ese escenario era muy difícil que se puedan desarrollar en nuestra provincia proyectos ganaderos. Creo que ahora la situación cambió rotundamente, ya comenzó la retención de vientres y el Gobierno Nacional tomó la firme decisión de recuperar los mercados internacionales. Creo que ahora es el momento de empezar a pensar en la terminación de terneros en nuestra provincia, ya que todo hace pensar que Santiago y Salta van a aumentar su stock ganadero en forma considerable.

- ¿Cuál es la situación de los frigoríficos en Tucumán? Para concretar la pregunta anterior, ¿hay mucho que reformar en esto de las instalaciones frigoríficas? ¿Nos falta mucho en Tucumán?

- En Tucumán hay 14 plantas frigoríficas y sólo 2 cuentan con control del Senasa. Actualmente, se faenan 20.000 cabezas/mes en nuestra provincia.

En materia de frigoríficos, las provincias vecinas han tomado la decisión de subsidiar frigoríficos, con lo cual se le torna muy difícil a los frigoríficos locales competir con ellos. En este sentido, necesitaríamos que el Gobierno de Tucumán apoye en alguna medida la actividad. Para dar algunos ejemplos, Tucumán no cobra introducción a las carnes que vienen de otras provincias, pero si Tucumán manda carne a otras provincias debe de pagar introducción.

Por otra parte, la alícuota de Ingresos Brutos y el sistema de percepción no nos permiten competir con los frigoríficos subsidiados de otras provincias. Si deseamos que Tucumán sea un punto de terminación de novillos, debemos cambiar algunas de estas cosas.

- Días pasados, La Asunción realizó su tradicional ganadero para esta época del año, donde se pusieron en la pista excelentes ejemplares, de muy buena genética. ¿Qué evaluación pueden realizar?

- En cuanto a los animales de raza Braford presentados a remate, fueron 62 toros vendidos, a un precio promedio de unos $ 63.200; precio máximo de $ 150.000, y un precio mínimo de unos $ 45.000. En nuestro caso, y en las cabañas colegas de Tucumán, también lograron excelentes precios, porque claramente se respira otro aire en la actividad ganadera. El productor es optimista con el futuro y está invirtiendo fuertemente en genética. Eso se notó en todos los remates que se realizaron, donde hubo muchos compradores y buenos precios. De esta manera, pronto vamos a recuperar nuestro stock ganadero histórico y volveremos a exportar al mundo. Ese crecimiento se dará en el norte de nuestro país y de la mano del Braford y Brangus.