Los internos de la Unidad 1 del Servicio Penitenciario de Villa Urquiza, que mantienen una huelga de hambre desde el miércoles, continúan esperando una decisión de la Justicia sobre su protesta.
Según explicó el director del penal, Guillermo Snaider, la Corte Suprema ya tomó intervención en el caso: “Se hizo presente la secretaria de Derechos Humanos del Alto Tribunal, Lourdes Bascary, quien dialogó con los internos y se comprometió a acelerar los puntos del petitorio”.
Cerca de 200 internos de un pabellón –todos con condena– presentaron un escrito donde se declararon en huelga de hambre. Solicitan que aquellos que cumplieron el 50% de su condena tengan beneficios como salidas transitorias, según lo que establece la ley 24.660.
“La protesta es pasiva, sin violencia y sin asistencia a los lugares de trabajo que tienen asignados”, comentó Snaider.
Para obtener estos beneficios, la Justicia Penal determinó que los condenados se realicen un análisis para saber si han consumido alguna sustancia prohibida.
En caso de que el resultado sea positivo, sería un impedimento para obtener las salidas. Snaider explicó que los reos consideran que eso no está dentro de la ley ni es justo y que “ellos se someterían a un tratamiento ambulatorio una vez que se otorgara el beneficio”.
Incidentes
Según se explicó, ayer no se permitió la visita a familiares de los internos que están en huelga por razones de protocolo y para no alterar la seguridad del penal.
“El resto de los presos –mil internos– sigue con sus actividades normales y recibieron las visitas”, indicó Snaide al portal de comunicación pública.
Además, explicó que los incidentes que se reportaron en las inmediaciones del penal se produjeron entre las personas que podían ingresar a visitar a sus familiares y los que no, allegados a los internos que se encuentran en protesta.