BUENOS AIRES.- El juicio oral por las presuntas irregularidades en la venta de la imprenta Ciccone Calcográfica continuó ayer con un cruce entre el ex dueño de esa empresa y el ex vicepresidente, Amado Boudou, en relación a una supuesta reunión entre ambos.
El ex dueño de la imprenta, Nicolás Ciccone, fue el primer imputado en aceptar declarar en el juicio y tras una larga reseña de su vida contó que participó de dos encuentros con el entonces ministro de Economía, Boudou, aunque aclaró que no llegó a hablar con él.
Nicolás Ciccone declaró que tuvo esos contactos en medio de las negociaciones que había encarado para vender una parte de su empresa, única en el país con capacidad para imprimir billetes, pero el ex vicepresidente aseguró que uno de esos encuentros fue casual y no pasó de un saludo, mientras el otro directamente no existió.
Ciccone señaló que sufrió una “presión tremenda” para desprenderse del 70% de las acciones de su empresa, al prestar declaración indagatoria en el juicio por supuestas irregularidades en la venta de esa compañía.
Antes de que Ciccone iniciara su exposición, el Tribunal Oral Federal (TOF) 4 le había dado la oportunidad a Boudou, quien aclaró que pensaba hablar más adelante y solo si consideraba que era necesario hacer uso de la palabra para defenderse.
“Para mí es indispensable empezar a ejercer el derecho a la defensa en este momento”, sostuvo el ex funcionario kirchnerista, tras escuchar las palabras de Ciccone en la sala AMIA del edificio de los tribunales de Comodoro Py, en el barrio porteño de Retiro.
“No hubo reuniones, no hubo audiencias. Un vez hubo un saludo a la salida de un canal, ante 40 personas, y la otra supuesta reunión no existió”, enfatizó Boudou en los cinco minutos que le pidió al Tribunal para hacer su descargo.
En el juicio se analiza si Boudou usó su cargo público para lograr que la ex Ciccone pasara a manos de su amigo José María Núñez Carmona a través del supuesto testaferro Alejandro Vandenbroele.
Durante toda su exposición, Ciccone relató cómo fue que logró posicionar a su empresa y también el derrotero hasta que fue comprada por The Old Fund, una empresa a cuyos dueños no conocía.
El ex dueño de la ex Ciccone Calcográfica sostuvo que los problemas económicos para su empresa comenzaron con la crisis del 2001 y que luego, durante años, intentó conseguir accionistas que le compraran una parte.
En ese contexto, Ciccone se cruzó con Boudou a la salida de Telefe, un día en el que ambos habían sido convocados para distintos reportajes, y, según dijo, lo saludó y entendió que debía seguir las negociaciones con Nuñez Carmona.
Más tarde, Boudou le respondió: “Le di la mano, ni sabía quien era. Saludé a todo el mundo que estaba ahí adentro. Acaba de decir que interpretó que yo le dije que hablara con Núñez Carmona”.
La audiencia de ayer duró más de cuatro horas y tras la declaración de Boudou pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo 31 de octubre, por problemas de agenda del tribunal, según explicó su presidente Pablo Bertuzzi. (Télam/clarin.com)