Mauricio Macri mostró su preocupación por los ataques de Estados Unidos y sus aliados a Siria, llamando al diálogo para evitar una escalada que ponga en riesgo la paz mundial. Lo hizo en Perú, en la sesión plenaria de la VIII Cumbre de las Américas, que quedó opacada por el conflicto.
En un giro al conflicto en Siria, el presidente de Estados, Donald Trump, ordenó el viernes por la noche atacar blancos en ese país con el apoyo de Francia y el Reino Unido después de los ataques químicos del mandatario sirio Bashar al-Assad dentro de su propio país que mataron a decenas de personas.
Rusia, aliado junto a Irán de Siria en una guerra civil que ya lleva siete años, denunció la decisión como contraria al derecho internacional y pidió que Naciones Unidas la condene.
Desde Lima, donde los presidentes del continente americano estaban reunidos y el gran ausente era Trump, muchos líderes mostraron preocupación por la mayor intensidad del conflicto, entre ellos Macri.
Los aliados atacaron tres de las principales instalaciones de armas químicas con más de 100 misiles, disparados desde barcos y aviones tripulados.
"La Argentina renueva su firme condena al uso de armas químicas tal como ha ocurrido en los últimos días en Siria. Igualmente condena la existencia de facilidades dedicadas a su fabricación y/o almacenamiento. En la delicada coyuntura de estas horas, Argentina hace un llamamiento a la comunidad internacional para hacer esfuerzos que permitan preservar la paz y seguridad, evitando acciones que generen una escalada de tensión y asimismo insta que se sigan caminos de diálogo en el marco de los compromisos internacionales existentes", dijo el Presidente.
"Con la fuerza de la dignidad, la defensa de la paz, de los pueblos del mundo, condenamos enérgicamente el ataque desquiciado de Trump contra el hermano pueblo de Siria. Ayer, inventaron irreales armas de destrucción masiva para invadir Irak, hoy lanzan misiles con excusa parecida", dijo el presidente boliviano, en la vereda opuesta a Macri.