LAGOS, Nigeria.- Al menos 30 personas murieron y otras 42 resultaron heridas en un triple atentado suicida con explosivos en Konduga, en el noreste de Nigeria, y atribuido al grupo insurgente yihadista Boko Haram, informó Usman Kachalla, responsable local de los servicios de emergencia.
Tres terroristas suicidas detonaron sus cargas explosivas el domingo a la noche, frente a un local en el barrio de Mandarari donde decenas de personas estaban viendo un partido de fútbol. El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) denunció ayer que el atentado fue cometido por tres menores, a los que se usó como “bombas humanas”.
Kachalla, que es director de Operaciones de Búsqueda y Rescate, visitó el lugar del suceso y explicó que 17 personas fallecieron de manera instantánea. El resto de víctimas mortales perdieron la vida posteriormente al no recibir atención médica inmediata.
El atentado, el peor en meses en el noreste de Nigeria, ocurrió en la ciudad de Konduga, a 38 kilómetros de Maiduguri, la capital del estado de Borno.
Konduga ha sido escenario de varios ataques de Boko Haram. En julio del año pasado, ocho personas murieron en otro atentado suicida en esta localidad. Tras casi 10 años de conflicto, la insurrección de Boko Haram, que significa en lenguas locales “la educación no islámica es pecado”, causó 27.000 muertos en Nigeria y más de 1,7 millón de personas siguen sin poder volver a sus casas.
El hecho más famoso protagonizado por los terroristas ocurrió en 2014, cuando secuestraron 276 niñas en Chibok, que fueron utilizadas como elemento de negociación y esposas para los yihadistas. Tras la liberación y el rescate de algunas, 112 permanecen en poder de Boko Haram.
Según el representante de Unicef en Nigeria, Peter Hawkins, diversas informaciones apuntan a que tres niños: dos nenas y un chico (de edades desconocidas), fueron utilizados en el atentado.“Es inaceptable que los niños se utilicen de esta manera”, sentenció.
La agencia de la ONU llamó a “todas las partes en este terrible conflicto a proteger a los niños en todo momento y a mantenerlos fuera de peligro”.
Según Hawkins, este incidente eleva a cinco el número de chicos que han sido empleados como “bombas humanas” desde enero de 2019. En 2018, 48 niños, incluidas 38 niñas, fueron utilizados en ataques suicidas, un descenso considerable con los 146 menores -45 niños y 101 niñas- empleados en 2017 para este tipo de acciones.
Unicef denuncia que más de 3.500 niños fueron reclutados y usados por grupos armados no estatales entre 2013 y 2017 en Nigeria, donde opera Boko Haram y desde 2016 también su escisión, Estado Islámico en África Occidental.
Los niños suelen ser reclutados para realizar funciones de combate o de otro tipo, mientras que en el caso de las niñas, muchas son violadas y obligadas a casarse con milicianos.
“Es otro día terrible para los civiles en el noreste de Nigeria y para quienes trabajan para ayudarlos”, dijo el coordinador humanitario de la ONU en Nigeria, Edward Kallon. (Especial)