Fue una triste Navidad para Los Tarcos y para el rugby tucumano en general. Ayer al mediodía, el club del ex aeropuerto perdió a uno de sus referentes históricos: Manuel Daneri, más conocido como el “Pibe”.
De sus 78 años, 65 los tuvo ligado al deporte de la ovalada, de los cuales los últimos 53 los pasó como miembro de los “Rojos”. Antes, había pasado por Tucumán de Gimnasia, donde se inició a principios de la década del 50. Tras un paso por Corsarios, desembarcó en Los Tarcos, donde cumplió todos los roles posibles: jugador, entrenador, árbitro y dirigente. De hecho, llegó a ser presidente de la institución durante cinco años, entre 2000 y 2005, período en el que fue distinguido por cumplir sus bodas de oro con el rugby. “El rugby significa todo para mí. Lo tomé con mucha pasión, desde mi inicio en Tucumán de Gimnasia, y luego en Corsarios y en Los Tarcos. Viví el rugby como jugador, como árbitro y como dirigente. Mi vida es rugby”, comentó en aquella oportunidad, al ser distinguido por la Unión de Rugby de Tucumán, que años antes -en 2002- le había otorgado el Cap, la máxima distinción.
Fue también una gran figura del arbitraje, llegando a ser titular de la Subcomisión de Árbitros de la URT durante varios años. Y así como logros y distinciones, fue cosechando amigos en todos los clubes. “El Pibe” era de esos que podía sentirse bienvenido en todos lados. Hace tres años, Los Tarcos decidió homenajearlo en vida poniéndole su nombre a la cancha 3 del club. Un gran reconocimiento para una figura del rugby tucumano.