Lejos de los prejuicios, lejos de los insultos basados en la apariencia y usando modos de vida, lejos de la prohibición de Daniel Pasarella promediando los 90’, lejos del peinado actual por antonomasia. Cerca de la aceptación, cerca del estilo, cerca de ese corte carré de Fernando Redondo, cerca -en definitiva- del pelo largo. Así podríamos describir nuestra ubicación hoy, día en el que simplemente queremos repasar algunos de los jugadores de Atlético que llevaron su camiseta y el pelo largo.
Está claro que nada, absolutamente nada tiene que ver el corte de pelo de un jugador con sus habilidades futbolísticas. Parece una estupidez aclararlo pero fue algo que no pudo entender justamente Pasarella antes del Mundial de Francia ‘98 cuando dejó afuera a Redondo, -quizás- el mejor volante central de la historia del seleccionado.
Sólo se trata de moda y, por qué no recordar quienes fueron los que le escaparon en el “Decano” al pelo corto.
Como toda moda, fue cambiando con los años. Quizás hasta pasados los 90, el pelo largo jamás fue la regla. En los 2000, se impuso el pelo lacio, con una vincha por detrás de las orejas. Hoy, el peinado clásico de cualquier futbolista implica raparse abajo, atrás y a los costados y un poco más largo arriba.
Los jugadores de Atlético lo llevaron de varias maneras pero si de pelo largo se trata, hay varios referentes actuales y del pasado. Mauro Amato aparece como el más importante. Ondulado, negro y suelto. Con ese pelo, flameando logró ganar uno de los clásicos más importantes para Atlético, el siglo pasado. Un poco más adelante, Fernando Robles se cansó de hacer goles con el pelo largo y una vincha a principios de 2000 en épocas de Argentino A. En esa misma época, Carlos Paratore llegó con un desmechado extraño y brillos en algunos de sus pelos. Y un poco más adelante, aparecería Martin Granero, también con vincha pero con el pelo lacio y rubio. Algo similar con Mario Artés, aquel jugador que llegó de San Martín de San Juan, con Ricardo Dillon. Este último también lo llevaba algo largo pero con rulos colorados.
De los actuales (aunque a partir de esta semana ya no pertenecerá al club) Dylan Gissi fue el referente del pelo largo. pero recogido con un rodete.
Bien hacia atrás encontramos a Ricardo Julio Villa, que no lo llevaba tan largo el pelot, pero al que le sumó una profusa barba. Raúl Aredes y Antonio Apud no estiraron las “mechas” hasta la espalda pero sí que dejaron crecer el cabello. Al “Turco” casi le tapaba los ojos, incluso.
Cómo olvidar a Horacio Pizurica que corrió para festejar el gol de tiro libre que “practicó toda la semana” con los pelos al viento. Walter Capozuchi fue otro de los que casi siempre llevó el pelo largo. De los arqueros, podría decirse que Francisco Ruiz fue el pionero. No siempre tuvo el pelo bien largo pero siempre se lo dejaba crecer según se puede ver.
Estos jugadores son sólo algunos. Para los hinchas de Atlético no son extraños, son “Decanos” de pelo largo.