El coronavirus profundizó la crisis económica de la Argentina y eso se refleja en el día a día de millones de familia. Así también lo relató Ángela Flores, una vecina del barrio Padilla que se comunicó con LA GACETA PLAY para contar su padecimiento.
La mujer explicó que estudia Enfermería y que se quedó sin trabajo a inicios de la pandemia, ya que cuidaba a una persona de riesgo. Ella está casada y tiene cuatro hijos. Sin embargo, dijo que los únicos ingresos que tienen en su casa son los de la Asignación Universal por Hijo (AUH), que cobra por dos de sus hijas. Eso representa $5.200, por lo que ese dinero sólo les alcanza para alimentos. Contó que dejaron de pagar los servicios, y que les cortaron el gas y la electricidad a pesar del decreto presidencial que prohibe la interrupción de los servicios esenciales hasta fin de año por mora o hasta siete facturas impagas.
Contó que lo que más sufra es la falta de electricidad, por el calor y porque no pueden estudiar de manera virtual. “Se me hizo una deuda de $15.000, impagables”, dijo. Afirmó que concurrió a la empresa EDET para pedir una refinanciación, y que se la otorgaron en cuatro cuotas de unos $4.600. Aseguró que le sumaron intereses y otros gastos, por lo que la y la deuda se fue a unos $20.000. “Con estas boletas no se puede: comés o pagás los servicios”, lamentó la mujer.
Flores cuestionó que se estén anunciando nuevas subas en los servicios públicos. “Vivimos de lo básico, de poder comer, y aún así se anuncian nuevos aumentos”, cuestionó.
Dijo que a pesar de su difícil situación económica optó por quedarse en su casa porque, como estudiante de Enfermería, conoce los riesgos del coronavirus.