ATENAS.- Un anciano sacerdote griego ortodoxo gritó: “Papa, eres un hereje”, cuando el Papa Francisco ingresaba ayer al arzobispado ortodoxo de Atenas y la Policía se lo llevó, situación que implica un recordatorio de la desconfianza persistente entre los dos. Iglesias divididas.

El video mostró al hombre, que estaba vestido con una túnica negra y un sombrero negro y tenía una larga barba blanca, gritando las palabras en griego afuera del edificio antes de que la policía se lo llevara.

Testigos dijeron que gritó lo suficientemente fuerte como para que el Papa escuchara sus gritos. El hombre parecía haberse caído mientras se lo llevaban y la Policía lo levantó. Francisco llegó a Grecia ayer para una visita de tres días que los católicos griegos esperan acercará a las iglesias orientales y occidentales.

El cristianismo se dividió en las iglesias católica romana y ortodoxa oriental en 1054 en lo que se conoce como el Gran Cisma, y durante siglos las relaciones fueron inestables.

En su discurso al arzobispo Beatitud Ieronymos II, Francisco pidió perdón en nombre de la Iglesia Católica Romana por su participación en los errores históricos que llevaron a la ruptura.

“Trágicamente, en épocas posteriores nos separamos. Las preocupaciones mundanas nos envenenaron, las malas hierbas de la sospecha aumentaron nuestra distancia y dejamos de cultivar la comunión”, dijo Francisco a Ieronymos, a quien conoció durante su primer viaje a Grecia en 2016.

“Siento la necesidad de pedir nuevamente el perdón de Dios y de nuestros hermanos y hermanas por los errores cometidos por muchos católicos”, dijo Francisco.

El Papa Juan Pablo II pidió por primera vez perdón por el papel católico en la ruptura cuando visitó Grecia en 2001.

Católicos y ortodoxos han estado involucrados en un diálogo encaminado a una eventual reunión durante décadas y cooperan en muchas iniciativas sociales, pero las dos partes todavía están muy separadas teológicamente.

“Creemos que tiene el coraje y la sinceridad para examinar los fracasos y omisiones de sus padres”, le dijo Ieronymos a Francisco. “Entre los que quieren ser llamados hermanos cristianos, el mejor lenguaje es, y siempre será, la honestidad”. (Reuters)