LA GACETA en Qatar 2022: Tagliafico aseguró que “si nos toca sufrir, sabemos cómo hacerlo”

En la comodidad del virtual Stadium I, un teatro literal de los sueños, con una pantalla curva del tamaño de media pileta de natación, Nicolás Tagliaco habla con la prensa en esta previa a la primera semifinal del Mundial, mañana a las 22 (las 16 de nuestro país), contra Croacia en la segunda casa de la Selección después de la Universidad Nacional de Qatar, el Icónico estadio de Lusail, donde sufrimos, lloramos y festejamos. Antes de Países Bajos y luego de Países Bajos.

El lateral izquierdo jugará mañana en lugar del suspendido Marcos Acuña, y en su libro de recuerdos como titular en Argentina data el 0-3 con el entonces futuro subcampeón en Rusia 2018. “Pueden tener algunos jugadores en su actual plantel, pero los dos somos diferentes, no creo que haya similitudes. Sí nos puede servir aquel partido como experiencia”, explicó el defensor como dejando abierta la puerta de que el único parecido preexistente entre ambos hoy son las ganas de avanzar hacia la copa en Qatar 2022.

Por supuesto que sus sensaciones son positivas. Ya lo habían mencionado antes de embarcar rumbo a Doha, la idea era llegar a la última semana del Mundial, pero con eso no basta ahora. “La sensaciones son muy positivas, pero todavía nos quedan objetivos por cumplir y estamos contentos por eso”, ya saben a qué objetivos se refiere Tagliafico, ¿no? Ganar mañana y el domingo. No nos adelantemos. vamos paso a paso.

Continuemos por este sinuoso camino de vivencias con la Selección en el emirato, porque si algo nos demuele los huesos a nosotros acá, esas son nuestras emociones. “Si se gana, hay que sufrir”, así pareciera estar conformada nuestra ficha técnica. Nos pasó con Australia, en unos octavos de final reencontra manejado, y nos pasó con los naranjas, cuando nos apretaron y lograron recuperarse del 0-2 a puro pelotazo. “Es difícil explicarlo, en partidos de eliminación suele pasar que vas a buscar con muchos jugadores empatar el partido. Las situaciones son totalmente diferentes en cada momento. Sabemos que puede pasar. Y si estamos en ventaja y nos toca sufrir, sabemos cómo hacerlo. Quizás deberíamos buscar la manera de que no nos generen tantas situaciones. Ya lo vivimos, ya lo experimentamos, así que debemos tratar de sufrir menos”, ojalá Nicolás. Por nuestros corazones.

Entre los colegas que invadieron este cine para hablar con el defensor argentino, uno de ellos le consulta en portugués sobre si imagina cómo romper el juego de futbolistas de altísima calidad como Luka Modric o las férreas manos del arquero croata Dominik Livakovic. “Fuimos viendo un poco a Croacia, sabemos que tienen jugadores de muchísima calidad, con buena estatura, tienen la capacidad de centrar y llegar al área. Vamos a tener que estar en los detalles y con nuestras armas, lastimarlos”, puntualizó un Tagliafico que blanqueó lo que cualquier equipo haría, sobre todo hablando de nuestra selección argentina. “Tratamos de enfocarnos en nosotros, en nuestro jugadores, nuestras fortalezas. Sabemos de su calidad y armaremos un plan de juego para contrarrestar a los jugadores que usted menciona. Sabemos a qué nos enfrentamos, estamos en una final”, así es amigo. Primero mi quintita, después miro la del vecino.

En la conferencia se abre una breve pausa con la salida de los fotógrafos. Sin embargo, las manos continúan levantadas a la espera de poder consultarle a Tagliafico sobre si ya quedó en el pasado la tangana con Países Bajos, o de si tuvo contacto con ex compañeros de Ajax, por ejemplo. “No somos máquinas, esto es fútbol y pueden pasar este tipo de cosas. Estamos enfocados en lo que viene, en el partido de mañana, queremos seguir cumpliendo nuestros objetivos. No hablé con ninguno de mis ex compañeros, sí los saludé en el campo de juego. Pero no tuve contacto días después, ya habrá momentos para hablar. A todos nos quedará una historia que contar”.

Avanzamos hacia el punto de ebullición de la conferencia, sobre cómo está Leo Messi y sobre cómo analiza Tagliafico su evolución como líder del equipo. El viernes pasado lo vimos quizás en una nueva versión, la del hombre pasional, sin filtros, muy Diego. “Leo siempre fue así, para nosotros es nuestro capitán, es nuestro líder. Es el que nos impulsa y nos da ese plus. Saber que lo tenemos en el campo nos motiva. Estamos encantados de que sea nuestro capitán y sabemos que podemos cumplir sueños a su lado”.

La pelota regresa a Croacia, entonces el zurdo reconoce las virtudes del rival y destaca que no cree posible ver a un conjunto croata en una versión “de aguante” cómo lo planteó Australia en octavos. “Ellos pueden jugar de diferentes maneras, por lo que vimos. Tienen jugadores de muy buen pie en el medio y, creo, en algún momento querrán sacarnos el balón. Tenemos que estar preparados para diferentes posibilidades”.

Una mención aparte merece el factor “infarto de los penales”. ¿Cómo hacer para no sufrir en una definición así? Parece ser una pregunta con una sola respuesta. O quizás no. “No es fácil expresarlo con palabras. Creo que en esta Copa tenemos la suficiente experiencia para poder estar en momentos así. En partidos de eliminación habrá momentos en los que tendremos que sufrir. Hay que llevarlos, quiérase o no, al disfrute”.