Los ocho rugbistas imputados por el asesinato de Fernando Baéz Sosa, y que por estos días son juzgados por el Tribunal Oral Criminal de Dolores, pasan sus días detenidos en la Unidad Penitenciaria N°6 de esa ciudad, en principio, hasta fines de enero. Por ese penal, años atrás pasaron diversos famosos que también tuvieron conflictos con la Justicia, entre ellos Guillermo Coppola y el cantante“El Pepo”.
Las claves de la segunda semana del juicio por el crimen de Fernando Báez SosaSe estima que el Juicio por el crimen del joven porteño Fernando Baéz Sosa culminaría el 31 de enero próximo. Ese día ya se conocerá la sentencia a los ocho acusados por aquel brutal asesinato ocurrido en Villa Gesell. En las últimas semanas, los rugbistas fueron trasladados desde el penal de Melchor Romero hasta Dolores para que todos puedan presenciar las 22 audiencias que se llevarán a cabo en principio. Una vez terminado el proceso judicial, y en caso de ser condenados, se especula que volverán al penal anterior donde estuvieron detenidos hasta diciembre.
Qué figuras reconocidas pasaron por el penal
En la Unidad Penitenciaria N° 6 de Dolores, ubicada sobre Riobamba 251, estuvo detenido Guillermo Coppola, el exrepresentante de Diego Maradona a quien se lo involucró en un caso de narcotráfico. El empresario estuvo detenido por tres meses hasta que la causa fue declarada nula por las irregularidades detectadas en el proceso judicial que llevó adelante el entonces juez Hernán Bernasconi, quien fue destituido a raíz de ello.
También pasaron por ese penal miembros de la banda de “Los Horneros” y algunos policías implicados en el asesinato del fotógrafo José Luis Cabezas. La ciudad fue blanco de las masivas cobertura periodística en aquel entonces.
El cantante de cumbia Rubén “El Pepo” Castiñeira fue protagonista de una tragedia cuando iba al volante de una camioneta en la ruta provincial 63. A la altura de Dolores, volcó y causó la muerte de su representante y el trompetista de su banda.
Se comprobó que estaba bajo los efectos del alcohol y circulaba a más de 130 kilómetros por hora cuando en esa ruta la máxima era de 80. También estuvo preso en el Penal 6 debido a que la causa tramitó en los tribunales donde hoy son juzgados los rugbiers.
Máxima seguridad en el traslado de los rugbiers
La cárcel es utilizada para albergar a los rugbiers mientras dure el juicio. Para trasladarlos a los tribunales se pone en marcha un amplio operativo de seguridad con vallado para garantizar que nadie pueda acceder a ellos.
Los imputados permanecen aislados de la población carcelaria por temor a un atentado y cuentan con escasa posibilidad de salida al patio en forma diaria.