Sin eufemismos, le reclaman al Gobierno que mande una intervención militar contra esos dos poderes del Estado
Gran cantidad de casos no reportados.
Trump y Bolsonaro comparten la postura de minimizar las consecuencias sanitarias frente a la pandemia.
El país está inmerso en una crisis política.
Habría impulsado campañas de odio en las redes sociales. Un video que acaba de salir a la luz lo muestra pidiendo cárcel para los 11 miembros de la Corte Suprema.
“No abran demasiado rápido o corren el riesgo de un resurgimiento del covid-19 que podría borrar la ventaja obtenida en los últimos meses”, afirmó la directora de la OPS, Carissa Etienne.
La cantidad de fallecidos en el vecino país ya supera los 31.000.
El alcalde, un pastor evangélico, también habilitó las iglesias. Afirma que el encierro dispara “trastornos”.
Se aclaró que la gente podrá bañarse en el mar, pero no permanecer en la playa.
Es el quinto país con más cantidad de fallecidos en el mundo.
El Presidente sigue desoyendo recomendaciones de las autoridades sanitarias de evitar las aglomeraciones e incluso ha dicho que el fin de semana hará un asado para decenas de invitados.
La propagación incontrolable del virus en el gigante sudamericano alarma a sus vecinos.
El mayor freno para combatir la expansión del virus es el propio presidente, según una publicación científica. Colapso sanitario y desobediencia de gobernadores y alcaldes.
"A nuestro entender, y aunque yo no soy médico, creemos que se podrían reanudar los partidos", dijo el presidente brasileño.
La situación en el país es crítica, con más de 7.000 muertos, pero hay equipos que se entrenan.
Brasil, México y Venezuela fueron los peores evaluados en la encuesta de la que participaron líderes de opinión y periodistas de 14 naciones latinoamericanas.
Bolsonaro insiste en sabotear las medidas de aislamiento y sus seguidores marchan contra los gobernadores que las impulsan. Difundieron un “meme” con el Presidente bailando en un funeral.
El mandatario expresó en las redes sociales su desacuerdo con la cuarentena que, de todos modos, ya ha sido decretada por los gobernadores.
