Pablo Gastón Zapata señaló a Lucas Pertossi. Dijo que el joven le fracturó la pierna en un bar y luego le robó una motocicleta.
Silvino Báez y Graciela Sosa están presentes en cada audiencia del juicio por el crimen de su hijo.
En la audiencia del jueves habló uno de los acusdos e identificaron a un joven del grupo que se encontraba en la escena del crimen.
Los Pertossi buscan despegarse de Máximo Thomsen para no ser condenados a prisión perpetua.
Declararán dos bomberos que habían asistido al joven en la madrugada del 18 de enero. También una víctima de la violencia de los rugbiers.
Ellos aseguraron que “están esperanzados” de que su hijo no reciba condena a prisión perpetua.
El fiscal sostiene que el crimen se planificó.
Es el más joven los ocho acusados por el asesinato del estudiante de Derecho. En ese momento tenía 18 años, ahora 21.
El letrado querellante sostuvo que “hoy se fisuró el pacto de silencio” entre los ocho acusados del crimen.
El joven es uno de los ocho rugbiers detenidos por el crimen del joven de 18 años en Villa Gesell y está imputado como “partícipe necesario” del asesinato.
El usuario anónimo también agrede a Julieta Rossi, novia del joven asesinado.
El fiscal Dávila destaca la importancia de la identificación de los acusados, entre otras pruebas.
Eduardo Benicelli, padre del rugbista, practica caza deportiva y subió fotos con animales muertos.
En el meñique de Fernando hallaron rastros genéticos de Blas Cinalli, un imputado que no pudo ser reconocido por los testigos del crimen.
La información fue confirmada por el abogado de los papás de la víctima, Fernando Burlando.
Los análisis de ADN fueron una de las claves en la octava jornada. Varias prendas de los rugbiers tenían marcas genéticas de la víctima.
El joven es dos años mayor que el rugbier acusado por el asesinato de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell.
"Quiero que me vengan a acompañar, por favor les pido, ese día va a ser muy doloroso para nosotros", el pedido de Graciela y Silvino.
En la jornada de hoy miércoles declararon los peritos genéticos.
Tanto la querella como la fiscalía señalaron que los elementos representan pruebas altamente incriminatorias.
