En julio, el precio del dólar blue subió hasta un 12%. Los ahorradores que comparan el rendimiento del plazo fijo tradicional con el comportamiento de la inflación están considerando cuál sería la tasa de interés "ideal" para realizar una colocación bancaria.
Según precisa el sitio especializado IProfesional, es importante recordar que, después de los altos datos de inflación registrados a principios de año y las posteriores subidas de tasas realizadas por el Banco Central, que llevaron la tasa nominal anual (TNA) del plazo fijo tradicional al 97% a mediados de mayo, el índice de precios al consumidor (IPC) dio un respiro en junio, al marcar un 6%, un nivel por debajo de la rentabilidad de un plazo fijo tradicional a 30 días, que ofrece en ese período un 7,97% para los depósitos de individuos físicos por menos de $30 millones.
"La inflación de junio dio un respiro, descartándose hasta el momento un descontrol en la economía. Como resultado, el BCRA no ha vuelto a subir las tasas de interés, lo que ha generado preocupación entre los inversores sobre la rentabilidad de los plazos fijos", afirma Roberto Geretto, economista y gestor de cartera de FundCorp.
En relación con el plazo fijo, la inflación y el dólar, si se analiza el comportamiento del precio del dólar oficial y del dólar libre en todo el 2023, se observa que se sitúa en torno al 60%, un nivel muy similar al de la inflación.
Según el último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) realizado por el Banco Central en julio, se estima que el índice de precios al consumidor (IPC) para todo el año en curso sería de 142,4%, mientras que para los próximos 12 meses se ubicaría en casi 161,4%.
"Estas dos variables han bajado algunos puntos desde la encuesta anterior, gracias a los datos del IPC de junio, pero si las comparamos con un plazo fijo tradicional minorista que ofrece un 97% de TNA y una tasa efectiva anual (TEA) del 154%, esta inversión se encuentra en línea con las expectativas de inflación para el 2023. Aunque se sitúa por debajo de la 'proyección optimista' del REM para los próximos 12 meses", explica Geretto.
Por lo tanto, señala que el principal riesgo de un plazo fijo tradicional es "el dólar e inflación", ya que históricamente la tasa de devaluación e inflación ha superado a la tasa de interés. Esto hace que los riesgos a largo plazo de un plazo fijo tradicional sean muy altos, lo que explica por qué la mayoría de las colocaciones son a 30 días, y los ahorradores comparan el dólar y la inflación mes a mes.
Como cobertura "natural" contra la inflación, se encuentra el plazo fijo UVA, que se ajusta por los precios de la economía.
"Suponiendo que se cumple el escenario optimista del 150% de inflación anual para los próximos meses, el rendimiento medido en TEA para el plazo fijo UVA sería del 151,5%, algo inferior al retorno de un plazo fijo tradicional", destaca Geretto.
Además, otra desventaja de las colocaciones UVA es que para obtener una rentabilidad similar a la inflación, es necesario esperar al menos un período de 90 días, lo que conlleva el riesgo de no poder retirar los fondos durante ese tiempo.
¿Cuál debería ser la "tasa ideal" del plazo fijo?
En este contexto de aceleración del precio del dólar, lo que podría afectar la inflación, los ahorradores se preguntan cuál es la "tasa ideal" que debería ofrecer un plazo fijo tradicional.
"Hoy en día, un plazo fijo tradicional alcanza para compensar la inflación esperada en el corto plazo, aunque en un mes en particular puede ganar o perder frente a los precios. Sin embargo, tanto el dólar como la inflación presentan cierta volatilidad y dificultad para proyectarlos hacia el futuro", advierte Geretto.
Por lo tanto, este economista considera que una colocación bancaria no solo debe remunerar la expectativa de inflación, sino también compensar el riesgo asumido.
"Bajo un escenario de inflación del 150%, si agregamos una prima de riesgo del 5%, la tasa del plazo fijo, como mínimo, tendría que ubicarse en casi 99% de TNA, para obtener una tasa efectiva anual (TEA) del 159% e igualar, al menos, el retorno de un depósito UVA más la prima de riesgo", reflexiona Geretto.
En cuanto a lo que podría ocurrir en los próximos meses, este analista considera que "todo parece indicar que la inflación de julio será mayor. Además, en agosto tendrán influencia las últimas medidas económicas tomadas, como el impuesto a las importaciones y la subida de los dólares financieros, factores que aumentarán la inflación".
Por lo tanto, según Geretto, en la comparación de tasas frente a la inflación, "todo parece indicar que el plazo fijo tradicional está pasando por un buen momento que pronto llegará a su fin".